La diversidad sale a la calle con el Encuentro Internacional de Folklore de Zaragoza
Danzantes aragoneses e internacionales desfilan por la Calle Alfonso I y ofrecen una pequeña muestra de sus tradiciones en la plaza del Pilar.
Aunque la mayoría no sabía lo que iba a ocurrir, los viandantes que paseaban por el centro de Zaragoza este jueves por la mañana no han dudado en unirse al desfile que los danzantes del XXVII Encuentro Internacional de Folklore Ciudad de Zaragoza (Eifolk) han protagonizado en la calle Alfonso I de la ciudad. Una muestra realmente diversa con países como Argelia, Argentina, Rusia, Panamá, Tailandia y España, representada por Aragón gracias a la compañía de jota Raíces de Aragón.
Una marcha que ha enseñado en la calle los diferentes bailes y cantos que se terminarán de desplegar en el Auditorio de Zaragoza en las actuaciones de este fin de semana y en las extensiones del festival, que llegará a dos localidades aragonesas: Tailandia y Argentina actuarán este jueves en Zuera a las 19.30, y Panamá lo hará en Binéfar en la jornada del viernes a la misma hora.
El desfile de este jueves ya ha dejado con las ganas a algunos de los asistentes como Sofía Heredia, que se ha topado con la marcha mientras caminaba por la ciudad. Hija de inmigrantes brasileños pero nieta de aragoneses, confiesa que se "emocionó" viendo las jotas, pero que le parece "muy bien" que se lleve este folclore a la calle. Y aunque la mayoría acudían a la marcha por el sonido de las jotas, muchos se quedaban viéndola gracias a que el resto de países llamaba su atención. Es el caso de José Ignacio Fernández, que se decanta por el grupo argelino como su favorito y afirma que le "encanta" la diversidad del acto.
Sin embargo, una vez que los grupos llegaron a la plaza del Pilar y fueron recibidos por el alcalde, Pedro Santisteve, y el teniente de alcalde, Fernando Rivarés, el ritmo del espectáculo se ralentizó para dedicar unos minutos a cada grupo. Las jotas de los estudiantes de la escuela Raíces de Aragón consiguieron arrancar aplausos, pero fueron pocos los que no se quedaron a ver al resto de países.
Actuaciones que fueron muy diferentes, desde la quietud y serenidad de Tailandia al ritmo frenético de Panamá pasando por los saltos de Rusia. Para las joteras Eva Forcano, Charo Valdivia y Conchi Baldamina, este ha sido el grupo que más le ha gustado, especialmente por sus trajes, sus gorros y sus acrobacias. Aunque cada uno de los asistentes tuvo su grupo favorito, todos pudieron ver diferentes tradiciones, cumpliendo uno de los objetivos del festival: conocer otras culturas. Para Rivarés, este es el espíritu del festival: "cuando bailamos hacemos un acto de solidaridad y hermanamiento con cualquier ser humano sin importar su condición".
