Laura Restrepo indaga en la naturaleza del monstruo en Los Divinos

Laura Restrepo (Bogotá, 1950) reside en España desde hace años. En un pequeño paraíso de Cataluña, pero no se olvida de su país, el paisaje de fondo, social y político, que lleva muy dentro. En diciembre de 2016 en Bogotá se produjo un crimen terrible, como casi todos los crímenes pero este aún lo parece más porque la víctima fue una niña de 7 años. Yuliana Samboní "fue secuestrada, violada, torturada y asesinada" por el arquitecto Rafael Uribe, de 38 años. La sociedad civil, enojada y rabiosa, se movilizó y logró que se le hiciera uno de los juicios más rápidos de la historia en Colombia, «un país marcado por la sinrazón y la violencia», dice. Uribe fue condenado a 58 años de prisión.

"Estoy lejos de casa, pero aquel crimen se convirtió en una pesadilla para mí. No me dejaba dormir; me arrastraba. Tuve la sensación de que me pedía que lo narrase. Y lo hice. Es uno de los libros que he redactado con mayor rapidez de entre todos los míos", dice la escritora, Premio Alfaguara en 2004 con ‘Delirio’, que fue invitada por la Diputación de Zaragoza. Habla de su novela ‘Los Divinos’ (Alfaguara).

Hijos de papá y mamá

Matiza: "Pero yo no quería hacer un reportaje o mi ‘A sangre fría’ particular. Para nada. No quería hacer una novela de investigación ni una novela negra. Me propuse hacer otra cosa: un libro de ficción que parte de ese hecho real y a partir de ahí avanza hacia diversos territorios. Me he planteado un viaje hacia el crimen y también me ha importado indagar en otra cosa: en qué medida Colombia, o cualquier sociedad, puede ser el caldo de cultivo en el que emerge un psicópata".

Dice la autora que le gusta merodear por los géneros fronterizos: mezclar realidad y ficción, embarcarse en la novela y en el ensayo, y desarrollar la verdadera potencia del novelista a través de la imaginación y el lenguaje. "Es muy importante para mí la lengua. Esta novela está impregnada de vocablos de Bogotá y es muy importante la ciudad, y en especial sus calles, los ambientes acomodados", señala.

Los Divinos, en realidad, son cinco chicos de la alta sociedad colombiana, a los que nos les falta de nada, son hijos de papá y de mamá, que parecen "destinados a dirigir el país. Están como por encima de los hombres, en otra esfera”. También son conocidos como Los Tutti Frutti. Y entre esos cinco está El Hobbit, que es quien narra la historia, "y lo hace desde adentro. Para mí era muy importante su reflexión, su visión crítica en ocasiones, y quizá la camaradería, que no está exenta de arrogancia", dice Laura Restrepo. Y está el Muñeco, que será al final, por razones un poco absurdas o incomprensibles, el brazo ejecutor: el asesino.

"No he desempolvado archivos ni documentos, no he seguido el proceso paso a paso. En mi país hay estupendos periodistas. Y a mí me interesaba, siguiendo la frase de Michel Tournier, mostrar al monstruo, bucear en sus razones y acceder a la región de los desconocido. Por eso suelo decir a menudo que la novela intenta hacer visible lo invisible". Laura Restrepo es una mujer comprometida con la libertad y colabora con varias ONG. Ha escrito del crimen, de la mafia y del feminicidio en libros como ‘La novia oscura’, ‘Leopardos al sol’ o ‘Delirio’, por citar algunos títulos.

Impunidad y desprecio

"‘Los Divinos’ también habla de la violencia sexual. Del abuso. De la perversidad. Esta es una novela sobre un personaje, y sus amigos, que lo amparan un poco, que escoge el mal, y lo practica con placer". Con placer y sin escrúpulos. "Eso es algo que me ha llamado la atención. Tanto El Muñeco como sus amigos, que no se atreven a tanto, se mueven en la impunidad, en el desprecio, en la soberbia. Y a la vez como novelista planteo una meditación: qué hay de nosotros en él". La novela aborda el descenso a los infiernos y presenta semejanzas con ‘Crónica de una muerte anunciada’ de Gabriel García Márquez.

"Supongo que lo dirá porque en las primeras líneas de esa novela se sabe quien ha muerto y quienes son los asesinos, y aún así García Márquez es capaz de mantener nuestra atención. ‘Los Divinos’ retrata la anatomía y la psicología de un monstruo, y es una reflexión sobre la frivolidad, el machismo y la incapacidad de desarrollar un comportamiento maduro», afirma Laura Restrepo.