Gabriel Latorre: "Me enamoré de la profesión de actor en el Teatro Principal"

"¿Estáis seguros de que me queríais llamar a mí?", se preguntó el actor zaragozano Gabriel Latorre cuando le comunicaron que había sido distinguido con el Simón de Honor de este año. No fue una equivocación. El intérprete, nervioso, ha explicado en el hotel Boston lo que le pasa por la cabeza a pocas horas de comenzar la gala de este sábado: "Es un sentimiento bonito recibir un premio en mi tierra maña. Me enamoré de la profesión de actor en el Teatro Principal. Y he tenido la suerte de poder trabajar con muchísimos grandes profesionales. No esperaba que se me reconociese con nada".

A su derecha, la actriz Gemma Cuervo, Embajadora del Cine Aragonés de esta edición, se ha esforzado por recalcar que la homenajeada esta noche no es ella. "Me parece maravilloso haber sido nombrada embajadora. Zaragoza es una ciudad cálida, la gente me ha parado por la calle, me ha dado muchos besos. Y yo quiero pasárselos a Gabriel, que es su día". En esta ocasión, los Simón reivindican el papel de la mujer en los albores de la historia del cine, algo que a Cuervo le congratula: "Las mujeres no nos merecemos un lugar, nacemos con él, en igualdad con el hombre".

Ambos han coincidido en las dificultades de la vida actoral, especialmente en los comienzos de su larga carrera. Pero se han mostrado satisfechos de haber dedicado su vida a una profesión que despierta tantas emociones en las personas, que las puede llegar a hacer tan felices.