El primer festival Mil, que se celebrará en Teruel del 8 al 10 de junio, iniciará su andadura por todo lo alto con la actuación el 9 de junio de Loquillo dentro de su gira ‘40 aniversario’. Además del cantante catalán, el ambicioso programa del certamen –presentado ayer por la consejera de Cultura, Mayte Pérez– incluye las actuaciones de la banda León Benavente, del escritor Kirmen Uribe y del DJ y excantante de Los Sencillos Miqui Puig.

Las actuaciones se llevarán a cabo en distintos escenarios de la Comarca de la Comunidad de Teruel, como las plazas del Torico y del Seminario de la propia capital, el entorno de la fuente de Cella y el castillo de Cedrillas. Pérez resaltó la "apuesta ambiciosa y de calidad" que se hace desde el Gobierno de Aragón al organizar Mil, un festival al que la DGA quiere dar continuidad. "No es una actuación aislada sino que forma parte de una estrategia" para "poner la cultura al alcance de todos los ciudadanos", señaló.

La programación combina conciertos musicales, sesiones de DJ, danza, proyecciones, intervenciones artísticas y recitales poéticos. El director, Leo Tena, resaltó por su singularidad la actuación del rapsoda Hasier Larretxea, que combina la recitación poética con el corte de troncos de los ‘aizkolaris’ vascos. Tena adelantó que la comarca vivirá "tres días muy intensos" con el amplio abanico de actividades previsto.

El programa incluye también la participación de numerosos artistas aragoneses, como los cantantes Mario Lafuente, Joaquín Carbonell o Ángel Petisme, el dibujante Toni Alcaine, las Despechadas Pinchadiscos o el grupo Sweet Home Trío.

La presidenta de la Comarca de Teruel, Ana Cristina Lahoz, celebró el nuevo proyecto cultural, que pone al alcance de pequeñas localidades espectáculos propios de "grandes ciudades". Pérez anunció que los escenarios del festival cambiarán a otras localidades de la demarcación comarcal en las sucesivas ediciones.

Aunque parte de los actos previstos son gratuitos, las entradas para los conciertos de Loquillo y León Benavente –ambos en la plaza del Seminario– costarán 30 y 20 euros, respectivamente, con la posibilidad de comprar un bono por los dos recitales de 40 euros. El presupuesto, de 70.000 euros, corre a cargo de la DGA, que espera cubrir parte de los costes con los ingresos y que apela al patrocinio privado para rebajar el esfuerzo de las arcas públicas y garantizar la sostenibilidad financiera del festival.