"García Mercadal sigue siendo aún hoy una figura controvertida"

Fue uno de los arquitectos más importantes de la España del siglo XX, “un autor polifacético, de una obra muy sólida y bien construida, camaleónico, ecléctico, pero, también, aún hoy sigue siendo una figura controvertida, polémica, con sus defensores y detractores”. Con estas palabras resume el profesor Enrique Castaño Perea, de la Universidad de Alcalá, una de las principales conclusiones que recoge el libro ‘Fernando García Mercadal (1896-1985). Arquitecto y académico’, que se presenta en la Biblioteca de Aragón de Zaragoza, en un acto al que está previsto acudan el coordinador del ejemplar, Castaño, así como los coautores Rafael Hernando de la Cuerda, de la Universidad de Alcalá, Jesús Escribano, de la San Jorge de Zaragoza, el catedrático de la Universidad de Cartagena José Laborda Yneva y Fernando García-Mercadal García-Loygorri, investigador independiente.

La obra nace a partir del fondo gráfico y documental que se encuentra en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y de la tesis de Rafael Hernando de la Cuerda, sobre la figura de García Mercadal, uno de los representantes de la arquitectura de posguerra, personaje clave en la internacionalización de la arquitectura española y eslabón entre España y el Movimiento Moderno.

Un arquitecto trascendental

“García Mercadal fue uno de los arquitectos, junto con Sert, más trascendental en los inicios de la arquitectura moderna en España”, afirma Castaño. Nacido en Zaragoza el 5 de abril de 1896, cursó en Madrid su carrera de arquitecto, que terminó en 1921 con el número uno de su promoción.

Poco después, en 1923 ganó el Premio de la Academia Roma, que será su punto de partida en sus viajes a diversas capitales europeas durante sus cuatro años de pensionado. En ellos estableció vínculos con las principales figuras de la arquitectura en ese momento.

García Mercadal fue uno de los arquitectos más importantes en la propagación de las ideas del ‘movimiento moderno’ en España. Su espíritu aventurero le permitió conocer de primera mano a los mejores autores del nuevo racionalismo europeo. Gracias a él, Le Corbusier y Gropius visitaron España en 1925.

Su primera obra fue el Rincón de Goya, construido en 1927, tras ganar el primer premio en un concurso que convocó el Ayuntamiento en Zaragoza. Fue uno de los espacios más emblemáticos de la ciudad, sobre todo, en aquellos años en los que la música fue su protagonista. Por su anfiteatro del Parque Grande pasaron artistas como Héroes del Silencio, Camarón, Paco de Lucía o Leonard Cohen, entre otros, hasta 2006, cuando el Ayuntamiento ordenó su derribo.

Maqueta del Rincón de Goya, proyecto de García Mercadal. Luis Mompel / Archivo Heraldo

En su ciudad natal, García Mercadal es el autor de edificios tan importantes como la Casa Grande (1947), el Ambulatorio de Ramón y Cajal (Paseo de María Agustín, 1962) o edificios de viviendas de la calle Zurita número 18 y Plaza de los Sitios número 16, (1928) o la casa del doctor Ricardo Horno Alcorta del paseo María Agustín número 7, (1929), entre otros, además del panteón del doctor Ricardo Horno Alcorta, en el cementerio de Torrero, (1933).

Vista del hospital Miguel Servet de Zaragoza. Luis Mompel / Archivo Heraldo

En España, el arquitecto aragonés tuvo el valor de “incorporar los postulados de Le Corbusier a la arquitectura de elementos como la cubierta habitable, la ventana corrida, la estructura independiente de la fachada o el uso de colores diferentes”, afirmó Castaño.

Pese a la vigencia de algunos de los principios arquitectónicos que defendió García Mercadal “chocó de forma importante con las tendencias de su época, tanto que, por ejemplo, el Rincón de Goya no gustó en su momento”, señaló Castaño.

Premio Nacional de Arquitectura

En 1932, García Mercadal obtuvo por concurso la plaza de arquitecto municipal de Madrid, como Arquitecto Jefe de le Oficina de Urbanismo y de Parques y Jardines. En 1933, ganó el Premio Nacional de Arquitectura, con su proyecto de ‘Museo de Arte Moderno’, e impartió clases en la Escuela de Arquitectura de Madrid como profesor de proyectos.

Durante la Guerra Civil Española tuvo un papel importante en la conservación de alguno de los principales monumentos de Madrid (La Cibeles, Neptuno, Portada del Hospicio, etc.). En 1946 accedió al empleo de arquitecto del Instituto Nacional de Previsión donde llevó a cabo una extensa obra construida durante el resto de su vida. Muy al final de la misma, en 1980, entró a formar parte de la Real Academia de San Fernando, cinco años antes de su muerte.

El Rincón de Goya. Guillermo Mestre

La monografía que se presenta en Zaragoza, compuesta por escritos de varios autores, aborda el estudio de la trayectoria profesional de García Mercadal en el contexto del proyecto moderno, analiza el desarrollo de toda su obra y completa las investigaciones parciales realizadas hasta ahora sobre el arquitecto aragonés.

El anexo propiamente dicho se compone de quince artículos que se pueden agrupar de la siguiente manera: los primeros sitúan a nuestro protagonista como académico, para luego repasar su vinculación con el Movimiento Moderno a través de sus viajes, sus modelos y sus dibujos, completando este primer bloque con un artículo sobre su actividad como arquitecto especialista en jardines.

Después hay un bloque de artículos donde se destaca su vinculación con lo mediterráneo, lo popular y lo vernáculo, y donde entre otras cosas se plantea la complejidad de sus planteamientos urbanos.

En la tercera parte se recogen aquellos artículos de carácter regionalista donde destacan sus aportaciones en El Rincón de Goya de Zaragoza, en el País Vasco o en Guadalajara, finalizando con aportaciones singulares sobre su obra hospitalaria y un artículo sobre cómo ha sido el transcurso del tiempo en la obra de Mercadal.

Para concluir y como colofón a todo el ejemplar hay un extenso artículo escrito por Rafael Hernando que plantea una mirada renovada a la obra de García Mercadal. “El texto, seguramente, no dejará indiferente”, apunta Castaño.