El concurso para elegir al nuevo director del Auditorio de Zaragoza, en entredicho

El Auditorio de Zaragoza busca un nuevo director, al tiempo que sobre el proceso, que se pretendía un ejemplo de transparencia, empiezan a aparecer nubarrones. La principal objeción que se le pone al procedimiento, iniciado en noviembre pasado, es el nombramiento de Llorenç Caballero Pàmies como presidente de la comisión que elegirá el nuevo director. Llorenç Caballero es el director-gerente de Ibermúsica, empresa privada promotora de conciertos y una de las principales fuentes de la programación del centro. Es también, y desde hace más de 20 años, director artístico de la Orquesta de Cadaqués, formación habitual en la programación musical del Auditorio. Varios de los que aspiraban al puesto han subrayado a HERALDO que el hecho de que en el comité de selección figure un empresario privado con intereses en la materia, "puede que sea legal, pero no es ético ni moral". Y es que una de las primeras cosas que tendrá que hacer el nuevo director del Auditorio será sentarse a negociar conciertos con el gerente de Ibermúsica, que habrá tenido mucho que ver en su nombramiento.

Ibermúsica es la principal promotora de música clásica de España y la más antigua. Llorenç Caballero se incorporó a ella hace un par de años y el hecho de que provea habitualmente de conciertos al Auditorio de Zaragoza lo prueba la lista de citas que organizó el año pasado: Orchestre de la Suisse Romande (30 de enero), Gustav Mahler Jugendorchester (27 de marzo), Orquesta de Cadaqués (22 de mayo y 14 de diciembre)... Este año ya ha traído a Zaragoza a la London Philarmonic Orchestra (30 de enero) y en abril (16) será el turno de la Tonhalle Orchester de Zurich. En mayo (8) volverá a ofrecer un concierto en Zaragoza la Orquesta de Cadaqués.

Según subraya uno de los candidatos, que prefiere mantener el anonimato, "una persona que desempeña su actividad profesional en el ámbito de la promoción privada de conciertos, y de la gestión de una orquesta que ha visitado con muchísima frecuencia el Auditorio de Zaragoza, que actualmente la sigue visitando, y que ha tenido y tiene intereses en la programación artística del Auditorio, se encuentra en una situación de grave conflicto de intereses, o incluso de ilegalidad, si es miembro de la comisión de selección del nuevo director del Auditorio".

Otro hecho que para los concursantes es improcedente es que "el tribunal encargado de evaluar las propuestas se dio a conocer días después de cerrarse el plazo de entrega de méritos y proyectos. Los candidatos nos presentamos sin conocer al tribunal".

El Ayuntamiento de Zaragoza sacó el puesto a concurso público el pasado mes de noviembre mediante "una convocatoria que se regirá por los principios de mérito, capacidad, igualdad, publicidad y transparencia". El consejero de Economía y Cultura, Fernando Rivarés, no tenía ninguna necesidad de hacerlo, por cuanto es un puesto de alta dirección que podía adjudicar libremente. Quien sea finalmente elegido sustituirá al actual director, Miguel Ángel Tapia, que se jubila, pero que fue nombrado también asesor de la comisión. Los interesados dispusieron hasta el 5 de diciembre para presentar un proyecto para desarrollar en cuatro años. "El futuro director deberá acreditar una trayectoria y experiencia significativas en la gestión y organización de espacios y/o entidades culturales, particularmente en el ámbito de la música clásica –establecían las bases–. Además se valorará la experiencia en la elaboración de programación musical y producción escénica, el conocimiento de artistas y producciones nacionales e internacionales, así como tener una visión innovadora para el diseño y gestión de las diferentes actividades del Auditorio".

Además de Caballero, el comité de selección lo integran Purificación Terrado, directora del Auditorio Enrique Granados de Lérida; Christina Scheppelmann, directora general artística del Liceo; José Antonio Echenique, asesor de la Quincena Musical Donostiarra; y Pablo L. Rodríguez, profesor de Musicología de la Universidad de La Rioja y crítico de ‘El País’.

"Esto es un paripé"

Dieciocho candidatos fueron admitidos en la primera fase del proceso. El jurado se reunió el pasado 30 de enero y eligió a los cinco que han pasado a la segunda fase, la de la entrevista personal. Los descartados recibieron al día siguiente un escueto correo electrónico: "De conformidad con lo acordado por la Comisión de Selección del proceso para el nombramiento del director/a del Auditorio de Zaragoza, se le comunica que su candidatura no ha sido seleccionada para la fase de entrevista del proceso de selección". Nada se ha dicho hasta ahora de quiénes y por qué han sido seleccionados, lo que ha sido objeto de críticas por parte de los participantes. "Esto es un paripé desde el primer día –subrayaba este martes Ricardo Soláns–. Todos los que nos hemos presentado somos profesionales y hemos invertido tiempo y dinero en preparar nuestras candidaturas. Lo lógico es que se nos comunique qué puntuación hemos obtenido, por qué no somos aptos y quiénes han resultado tener más merecimientos. Ni yo ni otros candidatos excluidos entendemos por qué no se publica la lista de admitidos. El proceso está falto de claridad y transparencia".