Restaurar los mosaicos de la villa romana de La Malena, en la localidad zaragozana de Azuara, costaría 1,2 millones de euros si se actuara de inmediato; más, si se deja correr el tiempo. Y construir una cubierta que los proteja de las inclemencias del clima y permita que sean visitados por el público, otros 1,9 millones. Estas son dos de las conclusiones de la memoria valorada que ha realizado Acción Pública para la Defensa del Patrimonio Aragonés, Apudepa.

Un equipo integrado por arqueólogos, historiadores del arte, restauradores y arquitectos técnicos ha trabajado en la memoria, que establece la urgencia de intervenir de inmediato y que subraya la necesidad de arrancar los trabajos con una partida presupuestaria de 342.000 euros para empezar a construir la cubierta que salve este conjunto único en España.

Si se hubiera actuado con coherencia y continuidad desde que los mosaicos fueron descubiertos en 1986, el coste hubiera sido menos de la mitad y hace lustros que los visitantes podrían recorrerlo y admirar, entre otros, el mosaico que representa ese momento mágico en el que los dioses del Olimpo compartieron mantel con los humanos por última vez.

El yacimiento de La Malena, en Azuara, va a cerrar 2016, el año en que se ha cumplido el trigésimo aniversario de su descubrimiento, sin una solución definitiva. Y, mientras tanto, todos los mosaicos hallados en las excavaciones arqueológicas de los primeros años sufren daños mes a mes. Un informe de 2013 sobre su situación –el más reciente que maneja el Gobierno de Aragón–, elaborado por la empresa especializada Artyco, es demoledor.

El estudio revela la existencia de grietas, abolladuras, debilitamiento de las teselas, roturas a causa de raíces y tallos de árboles, pérdida del mortero de cohesión, e incluso detecta un problema de ‘cementación’ del geotextil (utilizado como sistema de protección provisional) con las propias teselas.

"El informe señala con total claridad que los mosaicos romanos se han deteriorado en los últimos 20 años bastante más que en los 1.600 anteriores –subraya la historiadora del arte Belén Boloqui, coordinadora de la memoria valorada–. Y señala además que no se puede esperar, que hay que intervenir ya. Nosotros redactamos la memoria, a petición de la DGA, y la entregamos en julio pasado. Estamos aún a la espera de que nos reciban y hablemos de La Malena".

Hinojos silvestres y olmos

Fuentes del Departamento de Educación y Cultura señalan que esa reunión tendrá lugar en el mes de enero, y que "hay prevista una inversión para 2017, aunque todo está pendiente aún de la aprobación de los presupuestos". En Apudepa temen que la partida que finalmente se apruebe sea insuficiente dada la gravedad de la situación.

Y lo mismo se piensa en Azuara, donde los vecinos se han empezado a movilizar para crear la Asociación de Amigos para la Defensa de la Villa Romana de La Malena, cuyo principal objetivo es, lógicamente, salvar el yacimiento.

"En el momento actual solo caben dos opciones –subraya José Román Roche, uno de los vecinos de la localidad que participó en el hallazgo de los mosaicos–. O se emprende una actuación de urgencia, sensata y comprometida, sin parches, o damos todo por perdido. Los daños son muy graves. La última limpieza del yacimiento la realizamos nosotros, los vecinos, en la primavera pasada. Los hinojos silvestres habían colonizado el yacimento y había una selva de olmos de entre uno y tres metros de altura. Cortamos raíces de hasta tres centímetros de grosor, que obligatoriamente habían tenido que dañar los restos arqueológicos. En un par de fines de semana limpiamos el yacimiento entre 16 vecinos. Creemos que el tema de la vegetación lo tenemos controlado, pero está también el problema de la humedad".

La memoria se ha entregado a todos los grupos políticos de las cortes regionales. Mientras, los mosaicos romanos más bellos de España siguen esperando.