Después de hacer miles de kilómetros presentando su primer disco por toda España en más de 150 conciertos durante los últimos dos años -tanto solos como acompañando a Fito, Leiva y M Clan-, Los zigarros están de vuelta con un nuevo disco repleto de rock acelerado y canalla que es toda una declaración de intenciones ya desde el muy elocuente título: 'A todo que sí'.

"Es una celebración y una intención positiva y vitalista", recalca el vocalista y guitarrista Ovidi Tormo, mientras su hermano Álvaro asiente y apostilla: "Es una celebración de la vida. La fórmula es la misma que en el primero pero mejorada en todos los aspectos, porque incluso tocamos y cantamos mejor".

Entre risas vuelve a tomar la palabra Ovidi para aclarar que aunque hayan mejorado en estos años en realidad no han "madurado nada". Muy al contrario, recalca que intentan "hacerlo todo más adolescente todavía" para mantener la esencia clásica del rock: "Mira a Chuck Berry, con casi noventa años y cantando canciones para quinceañeras toda su vida".

"Es que cuando te haces mayor le das más vueltas a todo en la vida, pero estoy hay que mantenerlo con caos y pureza, con frescura y rapidez", reflexiona Álvaro antes de que Ovidi sentencie la cuestión con una frase lapidaria que es un perfecto lema para Los Zigarros: "Mantenemos el espíritu adolescente del rock".

Este espíritu despreocupado se materializa en unas letras repletas de nocturnidad y alevosía que profundizan en el clásico desenfreno del universo rockero, algo que Ovidi concede como "bastante autobiográfico" porque ellos no se dedican a "recoger lechugas en el campo". "Nos gusta salir de fiesta y divertirnos, es evidente", confiesa Álvaro.Trabajadores del rock 

Aunque les guste divertirse, si hay algo que define a Los Zigarros es su determinación por vivir el rock con tanta voracidad como profesionalidad. Eso les ha mantenido en la carretera dos años presentando su debut, editado en 2013, tocando como invitados en las giras de Fito & Fitipaldis, Leiva y M Clan.

"Eso te da unas tablas que no todo el mundo tiene. Trabajar con esta gente te obliga a estar a la altura para ser excelente. La ascensión es ir tocando y naturalmente hacer tu propio camino. Nadie nos ha regalado nada, todo lo que tenemos nos lo hemos ganado nosotros y los pequeños pasos son muy agradables. Lo hacemos todo lo más coherentemente que podemos", explica Álvaro.

Tras asegurar que no tienen ni idea de cuantos kilómetros han podido hacer en furgoneta por España, aunque son "miles de miles", la pareja reflexiona sobre la falta de bandas de rock como el suyo en el país, algo que Ovidi achaca a que "es una música que por un lado está pasada de moda y a la vez, como ya no se hace, es nueva".

Álvaro añade a este respecto que él se pasa el día "buscando grupos" pero termina escuchando "otro tipo de música" porque no encuentra en el rock algo "realmente" como ellos. "Pero los hay, tiene que haber alguien tocando en los locales haciendo este tipo de rock que bebe de AC/DC, Ramones y tantos clásicos", recalca.Dificultades para hacerse escuchar

Con su habitual fresco descaro, Los Zigarros aprovechan para criticar a las grandes emisoras comerciales, con Ovidi afirmando que todo lo que suena en ellas es "gente desconocida que no vende entradas de conciertos", con una fórmula basada en colaboraciones de estudio entre artistas diversos.

"Cuando yo era chaval en Los 40 ponían Nirvana, AC/DC, Loquillo y lo que hiciera falta. En Estados Unidos en la radio comercial conviven todos los estilos porque todos venden y hay negocio para todos", plantea Ovidi, antes de que Álvaro diga que "aquí podría ser igual pero todo está mal planteado desde la raíz".

Ahondando en la cuestión, Álvaro denuncia que "todo está mal planteado desde la raíz y la industria musical es una mierda gobernada por viejos dinosaurios. Necesitamos que venga gente joven con ideas nuevas y genere movimiento. Necesitamos "sangre fresca y que los dinosaurios se extingan".

Ante estas dificultades para hacerse escuchar, Ovidi señala que lo que les queda a los grupos es "tocar y tocar, casi como si fuera un trabajo de oficina. "Que está genial porque al final somos músicos, pero si luego no hay ni un reconocimiento por parte de los grandes medios... la pescadera de tu barrio no se entera aunque puede que sea muy rockera", apunta.Vuelta a la carretera

Lejos de ahogarse en estas reflexiones, tanto Ovidi como Álvaro retoman el pulso recalcando que tienen muchas ganas de regresar a la carretera -inician gira este viernes en Jaén- para "aportar algo de diversión" al panorama. "Intentamos que la gente salga de nuestros conciertos alucinando como salgo yo de uno de AC/DC. Le ponemos electricidad y diversión al asunto", sentencia.