Rosendo Tello

Con las autoridades entre el público y el público en la mesa presidencial, Rosendo Tello, el poeta total, acercó esta semana a sus lectores su último poemario, ‘Revelaciones del silencio’. Silentes estuvieron el director general Ignacio Escuín y el concejal Fernando Rivarés, disfrutando de la reunión de amigos en la que se convirtió la presentación en el Teatro Principal. Rosendo llegó acompañado de su mujer, Maribel Sánchez Aparicio, que puso voz a sus ideas y sentimientos, como sucede desde siete años, cuando un ictus le dejó inmovilizada la mano derecha y dificultades para hablar; circunstancias que no le impiden a los 85 años seguir ejerciendo de maestro con su lírica.

Chusé Aragüés, de Gara Ediciones, vuelve a ser su editor. Él hizo las presentaciones y le quedó tiempo para recordar al amigo común que les presentó hace 42 años: Luis Felipe Aguirre. "Se encuentra haciendo la temporada en las Américas, pero bien sabes Rosendo que si los deseos se cumplieran hoy estaría acompañándonos; tus ‘Revelaciones del silencio’ le han encantado", le comentó al poeta.

El editor le cedió la palabra al escritor José Luis Corral, quien insistió en poner la amistad en el centro de la escena. "Lo conocí hará 13 años y lo único que lamento es no haberlo hecho antes". Habló del poema de Rosendo Tello dedicado a los amigos, en cuya gestación, dijo, los profesores José Carlos Mainer y Dolores Albiac, presentes en el teatro, "tuvieron mucho que ver". También lo hizo de la amistad que preside el día a día de la Asociación Aragonesa de Escritores que el protagonista de la velada fundó y de la que es presidente de honor.

En el nuevo libro se centró Juan Marqués. "Es generoso y de largo aliento; con poemas muy meditados y serenos; retóricos y a la vez sencillos". Lo suyo fue más bien un ejercicio de veneración hacia el poeta: "He perdido la cuenta de cuántos libros de plenitud e inspiración lleva; en este caso dialoga con todos los anteriores como si fuera un balance". Y hasta hace guiños a la actualidad, "desahogos", cuando en su lírica aparecen la prima de riesgo o la corrupción, "eso sí, con naturalidad y mucha gracia", matizó. Mariano Anós y Luis Trébol recitaron a continuación varios poemas de ‘Revelaciones del silencio’. Plácido Serrano puso la música de fondo y entre el público se vio disfrutar, entre otros, al escritor José Luis Acín, al poeta Adolfo Burriel o al bibliófilo José Luis Melero. Maribel Sánchez Aparicio agradeció en nombre de Rosendo el cariño recibido y expresó su deseo de seguir viendo en muchas más ocasiones a tantos buenos amigos.