Las tauromaquias de Goya y Barjola, Fuendetodos

La sala Ignacio Zuloaga del municipio zaragozano de Fuendetodos acoge desde este sábado la exposición 'Goya-Barjola', una muestra dual de dos artistas separados por más de un siglo pero unidos, entre otros muchos lazos estéticos, por una misma temática: el mundo de los toros.


De esta forma, la Tauromaquia de Goya y las dos Tauromaquias del extremeño Juan Barjola (1919-2004) podrán contemplarse hasta el próximo 23 de marzo en la sala Zuloaga del municipio zaragozano, y constituyen dos ejemplos singulares de cómo estos dos artistas abordan ese mundo de "complejas armonías y relaciones que se establecen en la fiesta taurina".


La exposición está compuesta por las cuarenta estampas del pintor aragonés y las treinta láminas de las dos carpetas del pintor y grabador extremeño.


Entre estas últimas se incluyen veinte litografías, hechas en 1970, que están acompañadas de versos de Rafael Alberti y llenas de "color caliente, polvoriento e inevitablemente trágico de las corrida"; y diez aguafuertes (1991), con textos de Antonio Gamoneda, dialogan y se complementan en una sintonía tan visual como dramática.La Tauromaquia de Goya 


Francisco de Goya (1746-1828) encontró en la técnica del grabado una forma de expresión autónoma, libre de las ataduras del encargo. Escoge el aguafuerte porque está más relacionada con los aspectos gráficos del dibujo y sólo los grandes dibujantes son capaces de adaptarse sin esfuerzo al uso de la punta de grabar.


La mancha fue la preocupación de Goya que logró por medio de las aguadas de ácido nítrico sobre la misma plancha, atiende al volumen pero dislocando y articulando ferozmente los volúmenes. Escogió un gran formato donde podía dominar mejor las líneas de la composición y optó por un formato apaisado, y la mayoría de las composiciones carecen de fondo aunque la magia del ambiente y el sentido monumental del espacio están perfectamente significados por los efectos luminosos.

Bartola, un "Goya sublimado por Picasso" 

Francisco Umbral escribió que Juan Barjola (1919-2004) es "un Goya sublimado por Picasso". Barjola es el pintor más representativo del expresionismo español del siglo XX con connotaciones propias. A través del estudio y contemplación de su obra se puede entrar en lo que constituye el mundo "barjoliano".


Desde la abstracción al expresionismo figuran los temas esenciales de su pintura y obra gráfica: suburbios, camerinos, prostíbulos, retratos apócrifos, perros, mataderos y tauromaquias, que formaron su original temática.


El tema taurómaco fue un recurso recurrente a todo lo largo de los años del pintor: óleos, grabados, serigrafías, litografías, tintas o dibujos.