En una 'Ética de urgencia'

Fernando Savater aborda los dilemas juveniles a través de alumnos zaragozanos

El filósofo recoge las reflexiones de estudiantes del Instituto Virgen del Pilar de Zaragoza y de los madrileños San Isidro y Montserrat sobre todo tipo de asuntos.

Las nuevas tecnologías, el 15-M, la belleza o la muerte son algunos de los asuntos tratados.
Fernando Savater aborda los dilemas juveniles a través de alumnos zaragozanos
EFE

El filósofo Fernando Savater aborda dilemas juveniles actuales como las descargas ilegales de Internet, el movimiento del 15M, el capitalismo o la democracia en su ensayo 'Ética de Urgencia', que publicará el 30 de agosto, y que recoge las impresiones de alumnos zaragozanos y madrileños.


"La gracia de este libro (editado por Ariel) consiste en haber encendido la chispa para que los jóvenes reflexionen sobre asuntos cotidianos en unas charlas ausentes de paternalismo, con temas preconcebidos y otros que aparecieron en el 'cuerpo a cuerpo'", comenta Savater.


Veinte años después de publicar 'Ética para Amador', el filósofo y escritor transcribe las dudas de doscientos alumnos de los Institutos San Isidro y Montserrat, de Madrid, y Virgen del Pilar, de Zaragoza, tanto de ESO como de Bachillerato, tras haber dialogado con ellos.


Asuntos como Internet, las nuevas tecnologías, las descargas ilegales, los abusos de poder, el 15-M, las ventajas o desventajas del capitalismo o la fuerza y la debilidad de la democracia saltan a la palestra encauzados por el filósofo, junto con temas universales como la solidaridad, la belleza o la muerte.


A partir de la lectura de "Ética para Amador", escrita por Savater hace dos décadas y dedicada a su hijo de 15 años, los alumnos plantearon al filósofo sus dudas sobre cómo aplicar la teoría a la vida práctica, explica el autor.


Tras estas conversaciones, Savater saca la conclusión de que "la la enseñanza en valores en la escuela es imprescindible y ni se puede dejar en manos de cada familia, ni al albur de la televisión, ni al capricho de lo que corre por Internet".


Para Savater, "educar es tratar a los jóvenes como personas racionales y mostrarles los diferentes caminos a seguir, unos más válidos que otros; educar, es enseñar a preferir".


El filósofo se queja de que se hayan reducido las horas de la asignatura "Educación para la ciudadanía", ya que considera que su "Ética para Amador" fue un esbozo de lo que en un futuro sería esta asignatura, y lo considera "un error".


"Este gobierno ha dejado la asignatura en algo simbólico y ha suprimido las cuestiones más controvertidas cuando, y precisamente porque son controvertidas, son las que hay que afrontar en la escuela", argumenta.


Sobre las nuevas tecnologías, Savater considera que el mundo de Internet "añade una complicación más a la educación por la facilidad de conocimientos y las falsas informaciones, como 'ruido de fondo', y recalca: "Internet es una gran ayuda para los que saben, pero no puede sustituir a la educación si tienes lagunas de conocimiento".


El filósofo califica de "importante" el hecho de que la voz de los jóvenes sea hoy mucho más escuchada que nunca en la escuela, que haya más interrelación y se acostumbren a intervenir, pero critica "esa tendencia a la falta de autoridad de los profesores, a que no sean respetados ni se hagan respetar"


"Hemos pasado del excesivo respeto al profesor a tratarlo como si fuera una especie de 'colega' que, incluso, es un poco maltratado; en mi opinión, un educador no tiene que ser un tirano, pero está cumpliendo una función que necesita autoridad", concluye.


Sobre la crisis, el filósofo cree que los jóvenes "ya no dan por hecho que los bienes les han llegado caídos del cielo, sino que se han conquistado con esfuerzo y están en contra de los abusos y de la mala administración".


Respecto al cambio actual en la política de educación que fomenta las pruebas de evaluación, Savater se muestra partidario de los controles, "pero no como única finalidad", dice, del mismo modo que le parece absurdo que los alumnos pasen de curso sin haber sido evaluados.


El diálogo socrático es la herramienta fundamental que ha utilizado Savater para lograr que los alumnos descubran sus propias verdades y avancen y reflexionen sobre lo que hacen y los motivos que les empujan a actuar.