Hollywood

El teatro que ve pasar a las celebridades de los Oscar

Continúan los preparativos horas antes de que dé comienzo la gala de los Oscar.
El teatro que ve pasar a las celebridades de los Oscar
AFP

En los Oscar, si a alguien le falta el pase correspondiente no funciona nada. Ni siquiera para la superestrella de Hollywood George Clooney, que una vez llegó sin la documentación requerida a la entrega de los grandes premios del cine y se vio seriamente demorado por los controles de seguridad. Su asistente debió dar la vuelta, buscar el pase y regresar para que los guardias dejaran ingresar en la sala al célebre galán.


Al menos eso es lo que cuenta Julisa Smith que, mientras narra todo tipo de anécdotas de las estrellas, pasea por el famoso teatro en el Boulevard de Hollywood en el que tiene lugar la ceremonia desde 2001.


Este año, Clooney está nominado por su actuación en 'The Descendants'.


Al mostrar los recovecos internos del teatro que hasta hace poco llevó el nombre de Kodak, Smith no sólo cuenta cuáles son los requisitos para ingresar. También explica a qué se deben: no sería la primera vez que alguien que se parece a una estrella intenta escurrirse hacia el interior del salón. Por eso los controles. "Quien olvida su pase una vez no lo vuelve a olvidar nunca más", comenta.


Según Smith, una vez que las estrellas ingresan en la alfombra roja, no precisan más de media hora, en promedio, para pasar por delante de todas las cámaras y conceder breves entrevistas. Luego pasan por delante de la gran estatua del Oscar instalada en la entrada del edificio y suben al primer piso.


"Allí es donde termina la alfombra roja, se escanean los billetes y se les entrega a los invitados un programa", precisa Smith.


Las cámaras fotográficas particulares están prohibidas en el salón, incluso para los nominados. "Deben ser entregadas en el guardarropa", cuenta la guía.


Los invitados recorren entonces una alfombra beige, ya sea hacia arriba o hacia la planta baja, donde se encuentran los más importantes, los super vips. "Al pie de la escalera vuelve a hacerse un control a fin de asegurar que cualquier invitado no vaya a ponerse a conversar con Steven Spielberg".


Las escaleras que llevan al sector vip fueron especialmente diseñadas para la ceremonia de entrega: son particularmente amplias y planas para que las damas, que suelen lucir vestidos ajustados y tacones elevados, puedan desplazarse sin inconvenientes.


Los super vips también cuentan con un bar especial, donde pueden beber algún cocktail o aperitivo detrás de un vidrio esmerilado.


Los bares son de por sí un sitio importante en el teatro. "Los abrimos desde temprano y servimos champán", cuenta Smith. La idea es que si los bares ya están abiertos, los invitados pasen más rápidamente a la sala y no se demoren en la alfombra roja. Pero la táctica no funciona toda la noche. "Quince minutos antes de que comience el show, los invitados deben pagar sus bebidas y dirigirse a sus butacas".


El teatro posee capacidad para más de 3.000 personas entre los palcos y la platea. Muchos de los asientos rojos no son muy cómodos. Por razones obvias, los nominados suelen sentarse en la platea, cerca del pasillo.


Y por supuesto, una vez entregadas las estatuillas, la celebración no acaba. "Hay muchas fiestas", cuenta Smith. Entre ellas está la fiesta oficial, el 'Governors Ball', en el piso superior del teatro. El evento suele ser planeado con nueve meses de anticipación y la sala se preparada dos semanas antes. Se invita a 1.500 personas.


Y no es una fiesta del todo económica. Un show puede costar unos 30 millones de dólares (22,6 millones de euros), dice Smith, y el 'Gobernors Ball', si bien los organizadores no brindan cifras exactas, cuesta incluso más.