«Escribimos y tocamos de un modo bastante visceral»

Después de un año sin pisar escenarios españoles, han elegido el Sonorama como piedra de toque del nuevo álbum. ¿Alguna razón especial?

Habían contactado con nosotros en ocasiones anteriores, era una cita pendiente. Cuando surgió la posibilidad, vimos que por fechas el disco estaría acabado, incluso pensamos en hacer un pequeño parón en el proceso si no hubiera sido así para tocar en Aranda. Este festival nos parece muy interesante, es un grande, la zona también nos va... Vaya, nos pareció un sitio idóneo.

El tema 'Hacia lo salvaje' está recogiendo más cariños que azotes, algo que ya ocurrió con 'Antártida', el primer avance del nuevo disco. ¿Cómo se siente el grupo al ensayarlo?

Van bien las cosas. Tenemos muchas ganas de tocar las canciones nuevas en el escenario, no solamente las que dices: todas. La banda en directo somos Toni Toledo, que ha grabado el último disco; Chris Taylor, amigo de Londres que grabó en 'Gato negro', Jaime García a la guitarra, Eva y yo.

Del primer corte, 'Hacia lo salvaje', se han dicho ya cosas sorprendentes. Que si un 'Norwegian Wood' montañés, que si la melodía recuerda a la de 'The Power of Love' de Jennifer Rush... ¿Están de acuerdo con alguna de esas visiones?

La verdad es que no mucho. Escribimos lo que nos sale, lo tocamos de un modo bastante impulsivo, visceral, y no pensamos en estas cosas. Respetamos todo tipo de opiniones, son válidas, pero somos muy de ir a lo nuestro, hacer música, tocarla y punto.

¿Cómo ha sido el proceso de grabación? ¿Un parto duro?

No ha habido grandes obstáculos. Ha sido más bien un período de búsqueda de nuevas sonoridades. Si tengo que calificarlo, diría que ha sido muy divertido, una especie de juego. Todos los discos anteriores me han dejado esa sensación: siempre te enfrentas a una hoja en blanco, el pasado no importa, tampoco las dimensiones que haya podido cobrar el grupo. Nos abstraemos, y al tajo.

Es común ver a Eva y Juan como espectadores de conciertos por Zaragoza, especialmente en la sala Oasis. ¿Hay alguna velada reciente que les haya emocionado de manera especial?

Vamos mucho a casa y sí es verdad que solemos ir a conciertos, igual que hacíamos antes. Aunque vivamos fuera, tenemos muy presente nuestra tierra. Pero el último que hemos visto y disfrutado al máximo fue en Madrid: Eva se enteró de que tocaba Chuck Prophet con su visión del 'London Calling' de los Clash en un teatro pequeño. Cuando fue a Zaragoza nos lo perdimos, y fue una gozada, aunque había muy poca gente.

Amaral ya no está en una multinacional. Las 'multis' ya no son el Walhalla. Por un lado, es prometedor, pero... ¿no da vértigo caminar solo después de haber estado arropado tantos años?

No me parece un problema. Creo que vivimos un gran momento en general para la música, hay muchas bandas nuevas e interesantes y, sobre todo, variedad. Internet da acceso a música de épocas que no hemos vivido y que ahora podemos gozar: con un toque de ratón te trasladas a los años 20 o los 50: eso está muy bien. No echo de menos nada de lo de antes.

Días de Vino y Rosas dejó huella en muchos corazones. ¿Le siguen preguntando mucho por su antigua banda?

Ya menos. La verdad es que tampoco tuvimos una gran repercusión. Fue un grupo de aprendizaje, muy importante para nosotros, más que para los demás. Sí he seguido lo que hacen musicalmente mis compañeros, como los proyectos de Gonso, y estoy al tanto de lo que hacen otros amigos de Zaragoza. Hace poco conocí a Simón, guitarrista de Almas Mudas, aunque aún no sé mucho de la banda, pero me alegro de la repercusión que están teniendo. Les deseo toda la suerte del mundo.

La gira arranca en Zaragoza, aunque después de Aranda tienen otro 'bolo' en Figueras a principios de septiembre. El Palacio de Congresos de la Expo ya ha puesto el cartel de 'no hay billetes' para los días 6 y 7 de octubre, y el 8 va camino del lleno...

En Zaragoza tocaremos las 12 canciones del nuevo disco por primera vez, en Aranda y Figueras probaremos algunas. En los conciertos de Zaragoza tocaremos además 14 ó 15 más de los discos anteriores. Serán noches muy especiales, eléctricas y llenas de energía. No es la primera gira que empezamos en Zaragoza, sí es la primera vez que tocaremos en este escenario: estamos muy agradecidos a los que ya han comprado sus entradas y estarán allí con nosotros, es impresionante llenar dos noches a dos meses vista...