«Escribo relatos para mí y novelas para los demás»

Hola, amigos. Acabo de llegar al Heraldo y comienzo a responder a vuestras preguntas, no sin antes agradeceros que estéis al otro lado. Un saludo a todos.

En su última novela, el trasfondo de la Barcelona de principios del siglo XX juega un papel importante. ¿Por qué decidió situarla en ese periodo histórico? Lector

Barcelona es la ciudad que amo, el lugar donde me gusta vivir. Me parece honesto escribir de lo que te importa, pero no solo la elegí por eso, en esta ocasión, sino porque la historia que cuento no podía situarse en otra parte. Había varias cosas de esa Barcelona de finales del XIX-principios del XX que quería novelar desde hacía mucho: el nacimiento del Ensanche, la figura de El Santet, el pavoroso incendio de los Grandes Almacenes El Siglo... Esta novela ha sido mi ocasión para hacerlo.

¿En qué vertiente literaria se siente más cómoda: la narrativa juvenil, el relato o la novela? Pedro

En todas, depende del momento. No hago muchas distinciones entre literatura juvenil y literatura, sin más, de modo que para mí son casi la misma cosa, con la única excepción, quizá, de ciertas licencias temáticas que me permito cuando escribo para jóvenes (por ejemplo, dar rienda suelta a la literatura de género, que siempre me ha interesado mucho, sin contenciones que me reservo para la otra). Por lo que respecta al relato, tengo la impresión de que es más ensimismado, una especie de acto de egoismo literario. Escribo relatos para mí y novelas para los demás. O, por lo menos, así lo siento.

Buenos días, me gustaría saber ¿cuánto tarda en escribir una novela? ¿Tiene novelas incompletas esperando un final? Muchas gracias. Juan

No creo que exista un escritor que no tenga obras incompletas durmiendo en los cajones (o los archivos de su ordenador). Yo también, por supuesto, y varias. Y con respecto al tiempo, depende de cada novela. Suelo escribir unas 5 páginas diarias, lo cual significa que, en tiempos de trabajo intenso, soy capaz de escribir unas 100 páginas al mes. Estos cálculos, por fortuna, no son matemáticos. Hay que contar con los buenos y los malos días. Con las circunstancias externas, aunque trates de tenerlas a raya. Y con la dificultad de la historia, con el tiempo de documentación, de corrección... Es una regla de oro que una novela jamás empieza cuando escribes la primera línea ni termina cuando pones el punto final. 'Habitaciones cerradas', por ejemplo, me llevó dos años, de modo que acabo de contradecirme. Espero haber contestado a su pregunta.

Siempre he querido escribir un libro, tengo una historia pensada, pero nunca me decido a empezar. ¿Me podría dar algún consejo? Jorge

El consejo más importante que puedo darte es que te decidas a empezar. A la hora de escribir una novela es importante tener presente aquel archiconocido proverbio oriental: un camino de mil kilómetros comienza con un primer paso. Así, te animo a que des ese primer paso tan importante. Lo siguiente, y no menos fundamental, es que perseveres. Es desalentador trabajar en algo que ocupa tanto tiempo y que nadie ve, ni espera. Hay que tener una voluntad de hierro. Trabajar a diario. Continuar aunque no tengas un buen día, a pesar del desánimo. Volver a empezar después de echarlo todo a la basura. Lo único que tienen en común todos los novelistas del mundo es ese tesón. Mucha suerte.

Hola, confío en que no le moleste mi comentario. Pero creo que lo suyo no puede considerarse literatura, quizá lectura de consumo fácil. Vendría a ser como un subgénero, desde luego mucho más exitoso y rentable. ¿Usted cómo lo ve? ¿Escribe lo que quiere escribir o lo que espera que tenga éxito? Ana

No me ofendo con facilidad, Ana. Todo el mundo es libre de opinar y de tener sus propios gustos y, por descontado, sería absurdo aspirar a gustar a todos. De todos modos, discrepo de ese adjetivo que me atribuye, fácil, porque en todo lo que hago procuro siempre huir de la facilidad. Aunque, por descontado, acaso no lo logro y usted tiene razón, nunca se sabe. Con respecto a la segunda parte de su pregunta, sí, escribo lo que deseo a cada momento. Cuentos infantiles para mis hijos cuando ellos los inspiran, relatos para mí cuando hay algo que necesito decirme, novelas para seducir -y entretener, gran contribución, siempre minusvalorada por los que van de intelectuales-, despertar la reflexión y emocionar a quien quiera leerme. Sé por muchos lectores que lo consigo, y eso me llena de una satisfacción que me compensa de otras cosas. Con respecto a lo rentable... estoy encantada de publicar en Planeta. No pienso pedir disculpas por ello. Pero sí pienso hacer todo lo que esté en mi mano porque mis libros sean de los que merece la pena leer.

¿Alguna vez ha sentido que le faltaba la inspiración, que las musas se habían olvidado de usted? Siempre me he preguntado ¿cuántas horas trabaja al día un escritor? Mañico

¡Ya lo creo que sí! Hay días en que no sale nada o no sale nada que merezca la pena. Hay que inventarse rituales para luchar contra eso. Yo me preparo un café, escucho algo de música o, si la cosa es muy grave, me voy a dar un paseíto en bicicleta por la playa. Luego regreso, me siento otra vez a mi mesa y trato de encontrar el hilo. Hay días que ni así, y es muy frustrante. Y sobre las horas, supongo que cada escritor podría darle una respuesta diferente. Yo soy muy obsesiva y trabajo muchas horas. Suelo ir con frecuencia a escribir al Monasterio de Montserrat, donde soy capaz de escribir doce horas seguidas (no es recomendable, lo sé). Si estoy en casa, escribo un promedio de 6 o 7. Aunque cuando empiezo o corrijo son muchas más.

¿Qué opina de los nuevos formatos electrónicos para los libros? ¿Ha experimentado ya con alguno de ellos? Ciberlover

Cualquier cosa que invite a leer me parece estupenda. Yo tengo esperanzas depositadas en ellos. Leo en lectores electrónicos con gusto -aunque prefiero el libro tradicional- y me alegra ver mis libros publicados en formato electrónico. Lo único que temo es la piratería.

No quería dejar de felicitarte de nuevo por la novela. Ya sabes cómo la disfruté. Necesito saber para cuándo una segunda parte... Todos tus personajes tienen mucho para crecer y explicar. ¿Lo tienes previsto? ¿Pronto? Gracias!! Alba

Muchas gracias, Alba. Lamento decirte que por ahora no me lo planteo. Estoy trabajando en otra cosa, pero no es una segunda parte de 'Habitaciones cerradas'. Según mi opinión, que no es necesariamente la buena, las historias de la novela están bien como están y sería un poco latoso insistir en ellas. A mí me apetece contar otras cosas. Anda, anímate a leerlas, igual te gustan tanto como 'Habitaciones cerradas'.

Me ha encantado su libro ‘Habitaciones cerradas’, lo he pasado francamente bien leyéndolo. Me ha recordado un poco a ‘La sombra del viento’, de Zafón. ¿Están creando los escritores catalanes una especie de género propio, un estilo quizá? Milupa

No sé si podría hablarse de tanto, o de una vuelta a ciertos temas (que por otra parte han estado siempre presentes). Barcelona es una cantera inagotable y es normal que exista una literatura que hable de ella. De todos modos, me temo que aspirar a la originalidad es inútil. Como mucho, podemos aspirar a contar lo mismo de otra forma, adaptándolo a nuestro mundo y a nuestros contemporáneos. Seguramente en eso, sí me parezco a Ruiz Zafón.

Soy estudiante de Filología y me gusta escribir, me gustaría saber si un escritor como usted puede vivir de la literatura, me refiero a vivir bien, o tiene que trabajar en otras cosas. Universitario

Ay, mucho me temo que para vivir bien hoy día hay que ser dueño de un banco, político o futbolista de un equipo muy patrocinado. Desde luego, pobrecito del que comience a escribir pensando en 'vivir bien'. Aunque este asunto depende mucho de lo que necesites para vivir, claro. La literatura es una carrera de fondo, que como los árboles, tarda mucho en crecer y dar frutos y que, cuando los da, hay que ver de qué naturaleza son y si son buenos para comer. También hay ciertas reglas del juego: la poesía difícilmente da dinero; los libros de no ficción suelen ser más rentables; los juveniles suelen tener una vida más larga que el resto de los libros; las novelas son como un melón: cuando te lo llevas nunca sabes cómo va a salir. De modo que es mejor ser muy feliz escribiendo, para que solo eso te compense... por si acaso.

¿Ha escrito alguna vez poesía o ha pensado alguna vez en un publicar un libro de este género? De todas sus obras, ¿a alguna de ellas en particular le tiene más cariño? Si es así, ¿a cuál y por qué? Mónica

Tengo dos libros de poesía publicados que considero dos accidentes (mi poesía es muy triste y solo la escribo en pleno naufragio, como tabla de salvación). También creo -lo digo en voz baja- que soy mala poeta. Con respecto a mi mejor libro... no suelo mirar atrás, ni releerme (sería absurdo, con todo lo que hay por leer), de modo que de todas mis novelas, la que suele ocuparme más tiempo es la siguiente. Mientras la pienso, sé que será la mejor hasta el momento.

¿Qué le inspira para ponerse a escribir una novela? ¿Trabaja esa inspiración o viene sola? Óscar

Me inspira todo. Desde una frase pronunciada por uno de mis hijos hasta un viaje a una ciudad soñada durante mucho tiempo. Lo pequeño y lo grande. La inspiración para escribir nunca está fuera, sino dentro de uno mismo. Para encontrar mucho, hay que buscar sin cesar. Eso es la inspiración: una búsqueda constante.

¿Cuáles son las claves que tiene un ‘best seller’? SAnjuan

Si las supiera, pensaría en venderlas (carísimas). Hablando en serio, no tengo ni idea. Hay un libro maravilloso de Sergio Vila Sanjuan, recién publicado, que responde ampliamente a su pregunta. Él es un especialista en el asunto, además de un buen escritor y periodista, y su opinión es mucho más interesante que la mía. A mí del 'best seller' me sorprende hasta el nombre, y más en los tiempos que corren.

Ahora, los libros tienen más competencia con las pantallas, los videojuegos, etc. ¿Cómo se consigue atraer a niños y jóvenes a la lectura? Lectora escéptica. Paula F. O.

Lo único que se me ocurre es escribir buenos libros. Quienes escribimos para jóvenes tenemos esa responsabilidad por encima de ninguna otra: atraerles a la lectura, hacer que se queden. Para lograrlo, solo se me ocurre conocerles bien y tratar de seducirles con una historia que les interese. Y esto es aplicable a cualquier tipo de lector, tenga la edad que tenga. Las pantallas y los videojuegos no deberían impedirnos conseguirlo. Son otra cosa, con su lenguaje propio y su propio momento. Es como si los melocotones no nos permitirán comer pescado. Hay un tiempo para cada cosa y todos los escesos, como las exclusividades, son malos.

¿Es más fácil escribir para niños o para adultos? María G.

Escribir siempre es difícil. De hecho, es difícil hacer bien cualquier cosa. Una barra de pan, un par de zapatos, un cuenco de arcilla... Quienes creen que la literatura infantil es fácil no han entendido nada. Igual que quienes piensan que después de mucho escribir para jóvenes puede uno 'dar el salto' a la novela adulta. O que escribir cuentos es un modo de practicar antes de lanzarse a la novela. Una vez a mi padre, que era pediatra, le dijeron que después de tanto visitar niños ya podía comenzar a plantearse la medicina de adultos. Pues eso mismo.

Ha sido un placer, amigos, compartir este rato con vosotros. Nos vemos siempre que queráis, con las palabras como pretexto. Y gracias a todos por participar. Un abrazo.