Viyuela, Delgado y Balaguer comparten 'El pisito' en Zaragoza

Rodolfo y Petra son novios y querrían comprar un pisito para iniciar su vida juntos. Pero su economía no está para alegrías y, cuando él pide ayuda a su jefe, este le aconseja que se case con su anciana patrona y así, en cuanto ella muera, podrá heredar su casa y establecerse por fin con su querida Petrita.

El genial Rafael Azcona ideó esa trama en la España de los años cincuenta, pero, como dice Pedro Olea, «los problemas para conseguir vivienda son los mismos que tienen los jóvenes ahora». El director, más conocido por filmes como 'El maestro de esgrima' o 'Morirás o Chafarinas', ha llevado a los escenarios 'El pisito' «gracias a Concha Velasco, que es como mi hermana», cuenta Olea. Ella le comentó al productor Juanjo Seoane que Olea podría ser el director idóneo, entre otras cosas porque trabajó con Azcona en 'Pim pam pum ¡fuego!' y 'Un hombre llamado flor de otoño'. «Cuando me lo propusieron me pareció de maravilla, porque la adaptación la hizo Bernardo Sánchez, que ya adaptó 'El verdugo' con éxito al teatro», dice Olea, que debutó como director teatral con 'Inés desabrochada'.

'El pisito' que llega ahora al Principal tiene una diferencia importante: el perfil de la señora octogenaria. «En la película, apenas tenía juego, era una mujer casi moribunda. Asunción le da una vuelta al personaje, se hace valer y querer y crea casi un triángulo sentimental. Yo creo que los jóvenes actuales preferirían casarse con una señora estupenda como ella que con Botín. Yo, desde luego, no tendría dudas», dice entre risas Olea, aludiendo al largo 'matrimonio' hipotecario con un banco que es preciso consumar para hacerse con una vivienda hoy día.