TRAS LA APROBACIÓN DE LA LEY SINDE EN EL SENADO

Sinde: «La cultura tendrá precios competitivos»

La ministra de Cultura se ha mostrado satisfecha con la aprobación en el Senado de la ley que permitirá el cierre de páginas web de descargas de contenidos sujetos a derechos de autor.

La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde
El Gobierno se compromete a modificar el canon digital
EFE

La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, ha asegurado que en los próximos años habrá cambios en el ámbito de la propiedad intelectual y las grandes empresas de telecomunicación verán en la distribución cultural «una gran oportunidad», lo que hará que los precios sean «más competitivos».


González-Sinde ha dado esta respuesta, en una entrevista en Telecinco, a un internauta que le preguntaba por qué en lugar de gravar a los usuarios de internet mediante el canon digital no se cobra a las compañías de telefonía una parte de los beneficios que logran con la banda ancha «más cara de Europa».


La ministra se ha mostrado convencida de que en los próximos años se verán cambios «en muchos ámbitos» de la red, que «no puede ser un ámbito distinto en el que no son aplicables las leyes que marcan nuestra convivencia».


En su opinión, las grandes empresas de telecomunicación «con intereses en muchos mercados» serán también «aliadas» de esa distribución de la cultura, «y van a ver que es una oportunidad», por lo que los precios de los productos culturales «serán más competitivos», ha asegurado González-Sinde, quien ha remachado: «Eso es lo que demandan los ciudadanos y es de lo que se trata».


La ministra se ha mostrado satisfecha con la aprobación este miércoles en el Senado de la ley Sinde, recogida como disposición final segunda de la Ley de Economía Sostenible y que permitirá el cierre de páginas web de descargas de contenidos sujetos a derechos de autor por orden judicial.


La prueba, según la ministra, de que todas las partes han sido escuchadas y de que la medida aprobada es «equilibrada» es que «no están plenamente satisfechos aquellos a los que otros han acusado de ser un lobby».


También ha respondido González-Sinde a otro internauta que ha preguntado sobre la posibilidad de prevaricación de la comisión encargada de decretar cierres administrativos, incluso aunque un juez decrete que no se contraviene el articulo 20 de la Constitución, que hace referencia a la libertad de expresión y el derecho al acceso de la información.


«No, no creo que prevarique la comisión de la propiedad intelectual», ha señalado la ministra, quien ha añadido que la administración «no tiene por costumbre prevaricar», y se ha mostrado convencida de que los encargados de esa tarea «actuarán conforme a la ley».


En su opinión, lo importante es entender que España es un país con un gran patrimonio cultural y una lengua que hablan 500 millones de personas en el mundo, «por lo que nuestra música, literatura, cine y arte tienen que estar en la red, porque tienen una demanda enorme, pero no puede ser que esa riqueza se pierda, no tribute y no genere empleos ni altas en la seguridad social».


Sobre la dimisión del presidente de la Academia de Cine, Álex de la Iglesia, ha afirmado que ha demostrado «mucha valentía y muy buena voluntad», y ha lamentado que haya dejado la presidencia de la Academia, dónde ha hecho «un magnífico papel».


No obstante, ha precisado que De la Iglesia no recibió «ningún encargo» del Ministerio de Cultura para negociar con las partes enfrentadas sobre el tema de la propiedad intelectual, y que lo hizo porque lo consideró oportuno.


«En todo momento ha intentado ayudar y creo que ha contribuido mucho a que se profundizara en el debate», ha dicho la ministra, quien ha expresado su deseo de que en la gala de los Premios Goya del próximo domingo De la Iglesia se siente a su lado.


En este sentido, ha dicho que «es una alegría compartir esa noche con el presidente de la Academia», quien además está nominado, lo que hará todo «mucho más emocionante», y ha añadido que tampoco le sorprendería que este año, al igual que en ediciones anteriores, haya «manifestaciones» o «reivindicaciones de grupos que aprovechan» la ocasión ante la gran «expectación» que despierta este evento.