El presidente de la Academia de Cine, Álex de la Iglesia, ha señalado, en declaraciones a los medios durante la recepción de candidatos finalistas a los Goya, que la industria española debe realizar "mejores películas" en el futuro para recuperar el pulso en la taquilla.

En la llamada 'Fiesta de los Nominados', se dejaron ver diversos miembros de nuestra industria, entre los que han destacado los directores de las cuatro cintas nominadas a la Mejor Película, Rodrigo Cortés, Icíar Bollaín, Agustí Villaronga y el propio Álex de la Iglesia.

La gala, celebrada en la Real Casa de Correos, también registró grandes ausencias, como la del español Javier Bardem o el canadiense Ryan Reinolds, nominados al Mejor Actor Protagonista junto a sus colegas Antonio de la Torre y Luis Tosar, que se acercaron al evento.

Después de su discurso protocolario, De la Iglesia ha reconocido el cine español "ha ido a peor" en taquilla y ha hecho autocrítica al señalar que, en el futuro, la industria debe "apostar más, estar más cerca del público y saber invertir el esfuerzo en donde merezca la pena".

"Yo creo que es un buen año, que hemos hecho buenas películas pero hemos fallado en taquilla. El cine español va a peor y conmigo. Creo que lo tenemos que hacer mejor. Y , sobre todo, darnos cuenta de que tenemos que hacer mejores películas", ha subrayado el director.

"Quiero unos premios repartidos"

Cuestionado las posibilidades de 'Balada triste de Trompeta' en los Goya, el presidente de la Academia ha señalado que prefiere unos premios "muy repartidos" antes de llevarse todas los galardones a los que aspira con su película. "Aunque tampoco lo he hecho mal", ha dicho.

"Me gustaría que los Goya estuvieran muy repartidos, por la cuenta que me tiene. Ya ha sido suficientemente problemático que recibiera tantas nominaciones. Me gustaría que el premio fuera lo más repartido posible, por el amor de Dios", ha precisado el realizador.

Asimismo, durante su discurso ante sus compañeros de profesión ha destacado el carácter de los artistas para "encajar los golpes" y volver a levantarse. "Hacemos lo que nos gusta y eso no lo puede decir todo el mundo. Hoy es un día de celebración", ha señalado.

Sobre la negociación de la ley Sinde, una cuestión que ha planeado sobre los nominados durante todo el evento, De la Iglesia ha subrayado que se está "dejando la piel" para encontrar una solución beneficiosa para todas. "Hago buenamente lo que puedo", ha dicho.