El fin de semana comienza hoy con un fenómeno ibicenco, algo londinense y también habitual en las noches osomadroñeras: un garito se muda a otro por una noche. Se trata de un local que gusta de travestirse, como si fuera un miembro de la Cámara de los Lores en una noche loca. La Estación del Silencio se convierte por un día en el Mar de Dios. De Tenor Fleta al número 1 de la calle Catania, sin transbordos. Toma ya.

También se adivina una concentración de despiporre en Ley Seca (Sevilla, 2), en cuyas instalaciones presenta Domador su 'Teóricamente imperfecta' (King of Patio Records) con un esperadísimo concierto electro-retro-experimental (ellos y sus amigos dixit, ojo). Los oscenses están desencajando mandíbulas con su segundo trabajo, más orientado al baile exogaláctico. Sus directos limpian la cabeza de zarandajas.

En la sala Modo (Doctor Casas, 7) están hoy Seven en homenaje al rock'n'roll español, a partir de las 23.00: revivalismo y oficio a manos llenas. Harley Heaven (Salvador Allende, 85, 22.00) cita a los hijos pródigos de Rockaway Beach, los devotos del flequillaco y la chupa, los tres acordes y las canciones de minuto y medio: JoséRamones, tributo al grupo sin 'Jose' en su nombre. En Drinks & Pool Aranda (Conde Aranda, 138, 22.00) toca el mestizo Claudio H, devoto del jazz con la coctelera siempre presta para la mezcla de estilos.

En el Salón de Actos de la CAI Independencia estarán desde las 21.00 Ambar Martiatu, Leonel Viera y Roberto Carballo, tres cubanos que han echado raíces en Aragón. Su espectáculo 'De boleros' hecho disco (Deuvedé Music) será puro azúcar, con lugar para la lágrima desgarrada.

También esta noche, la segunda tanda de actuaciones pro Nicaragüa en la sala López (Sixto Celorrio, 2) prepara desde las 22.00 su escenario para la llegada de KBKS, emblemática banda punk zaragozana, y el rabioso síncope musical de El Útimo Skalon, a precio cómodo: 5 euros. Fines solidarios.

Crisol de estilos

En Arena Rock (Plaza Utrillas, 3) se aplaudirá el 'savoir faire' de Los Modos, adalides 'mods' del powerpop local, que editarán nuevo material de la mano de Pedro Andreu y Voxcapo: desde las 22.00, con entrada libre. 40 Grados llenará de rock The Cavern Prior (Santa Cruz, 7, 23.00) y UZ Trío oferta jazz en El Zorro (Caracol Independencia, sótano 1) desde las 22.30. Trece Escalones estarán en el Refugio del Crápula (Mayor, 56, 22.00) y el cantautor local Mario Iriarte presenta su segunda maqueta -se entrega con los 5 euros de la entrada- en la Morrissey (Gran Vía, 33, 21.00). En La Campana de los Perdidos (Prudencio, 7, 22.30), la italiana Laura Furci se adentra en el jazz con su excelencia al piano como arma. En el Candy Warhol (Bolonia, 28), la cabina es para DJ Genzor. El sábado estará Dogman Star.

Mañana, Mutantes y tunantes

Se prepara una buena en Ley Seca mañana, hacia las 22.30. Los Tunguska Experience, con el ubicuo Octavio Gómez Milián, ejercerán de anfitriones musicales de los almerienses Monogay, banda cósmica que recuerda un pelín a The Vines pasados por un cyberturmix. Una hora antes, en La Casa del Loco, Yago, Belén Estaje y los Voyeur recordarán al personal que Zaragoza sigue siendo una cantera inagotable de talento, sobre todo cuando existe un punto de distinción. Voyeur ofrece música y un pintor en vivo: el arte no se limita a lo que sale de los amplis.

En la López, el sábado pertenece a Niños Mutantes. Los granadinos se traen sus 'Noches de insomnio', el refrendo de una década larga haciendo bien las cosas. Tienen sus fieles, que allí estarán, y para los despistados que solamente hayan oído la versión rockera del 'Como yo te amo' de Raphael, ya existe un botón de muestra. Son capaces de todo? lo mismo que Ángel Guinda, 'prota' de la noche en el Ciclo Poesía Para Perdidos de La Campana de los Ídem, que estará recitando (22.00) junto a los blueseros Cuidado con el Perro.

El domingo, en el Ciclo de Introducción a la Música, se presenta en la Mozart (11.30) el jazz latino del maestro Rudy Vistel. Precio popular y canela fina. Por la noche, en la Campana (21.30) estará Carlos Malicia con su deje 'brassenianos' y la ironía que le caracteriza.