LIBROS

Juan Eduardo Zúñiga se sirve del cuento para adentrarse en los rincones del alma

Este singular escritor, admirado y reconocido por la crítica, acaba de publicar 'Brillan monedas oxidadas'.

Juan Eduardo Zúñiga (Madrid, 1927) es "el jardinero más secreto de nuestra literatura", un "orfebre que explora con delicadeza los sentimientos humanos". Lo dice el vallisoletano Gustavo Martín Garzo, colega y admirador de Zúñiga y presentador de la nueva colección de cuentos del veterano escritor madrileño y "heredero de Dostoievski". Se titula 'Brillan monedas oxidadas' (Galaxia Gutenberg-Círculo de lectores) y advierte su autor que estamos "ante una de mis obras más personales, un libro muy distinto a los anteriores". Supone, en efecto, un significativo cambio de registro en la trayectoria de Zúñiga, que ha dedicado buena parte de obra a bucear en la profunda herida que le causó la guerra civil y a los grandes maestros de las letras eslavas a los que se propuso emular desde la infancia. Zúñiga, premio de la Crítica con 'Capital de la gloria' se adentra ahora por otros territorios narrativos para explorar los rincones más secretos del alma con una colección de relatos en su mayoría inéditos.


Para Zúñiga la literatura tiene mucho que ver con la ausencia, de modo que es "un indicio de lo inexpresado, de algo que no vemos y que está pasando". "Todos los relatos de este libro giran en torno al conflicto del ser humano con su medio, hablan de la intimidad de los estados de ánimo, pero también oyen la voz de la historia" dice de unos cuentos en los que aparece, por ejemplo, una nueva Lady Godiva trasmutada en una repartidora de pizzas que cambia el caballo por una moto para cabalgar desnuda por la ciudad "en un sueño de libertad". Fabula también en tono a la hipotética presencia de Kafka en Madrid para visitar a su tío, alto cargo de los ferrocarriles españoles, o sobre la degradación y la caída en la pobreza de un joven al que la sociedad ya ha condenado a una existencia sin amparo.


Ha querido Zúñiga encerrar además en el título la contraposición entre óxido y brillo para simbolizar "el fluir del tiempo que aparentemente erosiona la memorias que siempre brillará con su luz".


Juan Eduardo Zúñiga es un escritor muy apreciado por otros escritores pero que, a pesar de su calidad excepcional, no ha contado con el favor del gran público. Es la suya una trayectoria sostenida por el aprecio de la crítica, que lo consagró y lo ratifica como uno de los más singulares narrados españoles del siglo XX.


Ha alumbrado títulos memorables como, 'Flores de plomo', 'Largo noviembre en Madrid' o 'Capital de la gloria'. Su impecable obra narrativa incluye títulos 'La tierra será un paraíso', 'Misterios de las noches y los días', o 'El coral y las aguas'.