"Greg Dulli es todo energía y clase en escena"

La Casa del Loco está de cumpleaños: doce más uno para Ángel Nieto, trece para el resto del mundo con la excepción de algunas plantas de hotel y los aviones supersticiosos. Un recorrido que Chema Fernández, su programador, califica de insanamente alegre, por encima de todo. Esta noche (21.30, 8 euros en Linacero, 10 en taquilla) se soplarán las velas con Greg Dulli y su 'power' desenchufado, algo que suena a paradoja y que en el caso del músico estadounidense cobra sentido: pura energía desbocada en escena, con toques de elegancia aquí y allá.

Fernández mira hacia atrás con una sonrisa. "La palabra que primero me viene a la cabeza es alegría, una alegría sostenida. Hemos hecho cantidad de cosas que nos han gustado, y eso ya es mucho decir. Si me pides que elija un concierto, o cinco, va a ser difícil; una sala de medio aforo como la nuestra puede estar contenta de haber tenido a estrellas del más alto nivel nacional como Antonio Vega, Secretos, Ariel Rot o Loquillo, que antes de ir a un sitio piden buenas referencias, cosa que creo nos hemos ganado a pulso. También gente que casi empezó aquí y vuelve de cuando en cuando, como Quique González, o que tocaron en la sala cuando aún no tenían nombre, como Sunday Drivers".

En las apuestas internacionales, hay dos líneas preeminentes: el rock de América Latina y la llamada música 'americana', calificativo que atiende sobre todo en lo conceptual al rock sureño estadounidense. "Estamos orgullosos de nuestras apuestas, aunque sea muy difícil a veces llamar la atención del público local. Desde Café Tacuba, que son estrellas en América y llenan estadios desde hace veinte años, a bandas como Ozomatli, La Ley... concretamente, el concierto de Ozomatli lo recuerdo como algo memorable. Ese día estábamos setenta, y creo que todos diríamos lo mismo", apunta Fernández.

Del lado anglo, los nombres son legión en el archivo de la sala, como recalca su programador. "Steve Wynn, por ejemplo, es un gran amigo de la sala y ha venido varias veces: ahora regresa, dentro de un par de semanas. Gigolo Aunts venían mucho, y los Drive-By-Truckers son un grupo en un momento excelente, que vinieron aquí hace ya tiempo. Hay un componente de gusto personal en traer cosas difíciles de ver".

La Casa del Loco ha sido ecléctica en los géneros, pero en los últimos años ha tenido claro que la programación iría por la senda de "las cosas que se mueven, sea lo que sea. No somos de viejas glorias, aunque las hay en nuestra historia, ni una sala 'indie', porque hay mucho pop", afirma Fernández.

En cuanto a Greg Dulli, al que teloneará Junior McKenzie, se trata de una leyenda de la factoría Sub Pop de Seattle, surgido en los tiempos de la explosión 'grunge', aunque no se ajuste a las coordenadas más reconocibles de aquél movimiento. Su banda, Afghan Whigs, era una apuesta netamente rockera... con un punto de soul. "Es todo energía y clase en escena -concluye Fernández- y el formato de trío que trae ahora es impresionante. Arreglos bonitos y grandes canciones de rock con toda la elegancia del mundo. Un desenchufado, sí, pero enérgico".