TEATRO

La búsqueda de la personalidad propia, en la obra 'La identidad de Polán'

La función abre hoy el ciclo de teatro alternativo de Arbolé, certamen que ofrece obras hasta diciembre.

Los  personajes de la obra 'La identidad de Polán', abuelo republicano incluido.
La búsqueda de la personalidad propia, en la obra 'La identidad de Polán'
LA QUIMERA DE PLáSTICO

Anselmo Polán, un personaje atormentado que nunca pudo tomar las riendas de su vida, se enfrenta a una grave acusación: se le imputa el envenenamiento de los botes de leche condensada de un supermercado. ¿Es culpable? Si lo fuese, ¿qué le ha llevado a tomar una decisión tan extraña como estremecedora? Con este planteamiento arranca 'La identidad de Polán', la obra que estrena hoy, a las 21.00, el ciclo de teatro alternativo de Arbolé. La producción extremeña-leonesa representará otra función mañana a la misma hora y el certamen continúa el sábado con las obras 'Rayo, viento y ausencia' y Miguel Hernández para niños y niñas'.


"Hoy en día vivimos en una sociedad democrática, pero hay cosas que todavía persisten respecto a lo que había hace 50 años", explica Juan Margallo, director de la obra, que indica la razón por la que decidió enfrentarse al texto escrito por Miguel Murillo. "Habla de cosas que conozco muy bien. Yo estuve en un colegio de curas y la obra trata sobre la educación que se impartía no hace tanto tiempo".


La vida del protagonista está contada a base de 'flashbacks', que se suceden mientras avanza el juicio. "Su madre le impide tener una relación homosexual con otro chico, su padre no quiere que sea torero, no le dejan trabajar ni de cartero. Al final termina haciéndolo en el Catastro", detalla Margallo. La historia mezcla el drama con el humor esperpéntico y narra la presión a la que Polán se ve sometido, no solo por parte de su familia o el colegio, sino por todo lo que le rodea. Margallo traslada el problema del protagonista a la actualidad. "Aunque haya pasado tiempo, muchos de los problemas que trata la obra persisten. Por ejemplo, la sociedad sigue siendo machista, ¿acaso cobran igual hombres y mujeres por el mismo puesto de trabajo?", se pregunta.


La construcción de la identidad del protagonista se ve en entredicho una y otra vez. "El resto de intérpretes le obligan a comportarse tal y como lo hace. En realidad, se da cuenta de que no es nadie", añade el director. El único personaje que permite que Polán tenga una vía de escape es el abuelo, papel interpretado por Cándido Gómez. "Se trata de un republicano que vive escondido en el desván de la casa. Es el único personaje positivo de la obra", matiza.


Puesta en escena discreta

'La identidad de Polán' no utiliza grandes decorados en su puesta en escena y algunos actores representan dos papeles. Paca Velardiez, por ejemplo, interpreta a la madre y a la esposa del protagonista, Pilar Conde es la abuela y la suegra y Pedro Martín el padre y el abogado. Los actores se cambian de ropa en el mismo escenario, sin esconderse del público. Las diferentes altitudes de una escalera de mano representan los espacios en los que desarrolla la obra: la oficina, el colegio y la iglesia.