ESTRENOS

Reunión de machos

Stallone recluta a Statham, Li, Lundgren, Willis y Schwarzenegger, entre otros, en 'Los mercenarios', serie B que homenajea al cine de acción de los 80. También se estrenan las comedias románticas 'Killers' y 'Philip Morris, ¡te quiero!', con Jim Carrey y Ewan McGregor, la francesa 'Mi refugio' y 'Nothing personal'.

Sylvester Stallone, Jet Li. Randy Couture, Terry Crews y Jason Statham.
Reunión de machos
WIDE PICTURES

El cine de acción ha cambiado, ya no tiene la testosterona ni el tono gamberro de los años 80 y 90, y las estrellas de entonces se conforman, en el mejor de los casos, con estar en un segundo plano dentro de la industria. Sylvester Stallone sabe que su tiempo de gloria ya pasó y, como tiene dinero, se dedica a hacer lo que le gusta. Primero explotó las sagas que le dieron la fama (‘Rambo’ y ‘Rocky’) y ahora recluta a los iconos del género en ‘Los mercenarios’, una serie B sin pretensiones a la que no le importa ser, en el fondo, un producto caduco. Por la pantalla desfilan, además de él, Jason Statham, Jet Li, Dolph Lundgren, así como Mickey Rourke, Terry Crews y los ex luchadores Steve Austin y Randy Couture. Eso sin contar la guinda del pastel: las breves colaboraciones de Bruce Willis y Arnold Schwarzenegger.


Viendo el reparto uno comprueba que solo faltaron a la fiesta Jean-Claude Van Damme, Chuck Norris, Steven Seagal y Wesley Snipes. Lástima, dicen los aficionados. La película, un homenaje a la acción violenta y bruta de hace dos décadas, está destinada a los nostálgicos y al público juvenil masculino. En los foros de internet hay cierta expectación por el largometraje. Más de uno pagará la entrada solo por ver en una misma escena a Stallone, Willis y Schwarzenegger... El argumento es lo de menos, la importancia reside en las secuencias de acción, la mayoría rozando el disparate (de forma consciente), y la socarronería del elenco. El filme gira en torno a un grupo de mercenarios que intentará hacer frente a un dictador latinoamericano. Stallone no descarta preparar una segunda parte de esta reunión de tipos duros.

Cariño, soy un espía

 

Después de la extraña ‘American playboy’, Ashton Kutcher vuelve a senderos más convencionales en ‘Killers’, comedia romántica que produce y en la que no faltan las escenas de acción. Su pareja es Katherine Heigl, que insiste en convertirse en una de las figuras reconocibles del género. Ambos contentarán a sus fans en una película simple y ligera, típica de estas fechas veraniegas. Otra cosa es que entretenga a quienes buscan en el cine algo distinto y/o original (no es el caso). Kutcher interpreta a un joven guapo y encantador que oculta a su mujer que en realidad es un agente secreto... y quieren matarle, lo que obviamente les meterá en problemas. Entre los secundarios de este filme de Robert Luketic (‘La cruda realidad’) sobresale Tom Selleck.


Jim Carrey, el rey de las gesticulaciones, y Ewan McGregor protagonizan una comedia romántica atípica, en el sentido de que ellos son los amantes, y un filme de contenido gay no es muy habitual en la industria estadounidense... No obstante, que nadie vaya a ver ‘Philip Morris, ¡te quiero!’ pensando en el morbo, porque no lo encontrará; la relación entre ambos es muy ‘light’. Carrey encarna a un estafador experto en cambiar de identidad y en fugas carcelarias que conoce en prisión al amor de su vida (McGregor). Aunque las huidas de Carrey resulten sorprendentes, cabe destacar que el filme está inspirado en hechos reales. Por su ritmo y estilo, esta fábula amorosa puede recordar a ‘Atrápame si puedes’. Se trata del debut en la dirección de los guionistas Glenn Ficarra y John Requa. En el reparto figuran Leslie Mann y Rodrigo Santoro.


La propuesta de autor de la semana viene firmada por François Ozon, quien parece haberse recuperado del traspié artístico que supuso ‘Ricky’. El francés es un director a tener en cuenta, con trabajos interesantes y arriesgados, aunque a menudo pequen de pretenciosos. En ‘Mi refugio’, avalada por ganar el premio especial del jurado en el Festival de San Sebastián, muestra la vida de una joven (Isabelle Carré) con un turbio pasado de drogas que está embarazada de su pareja, ya fallecida por sobredosis. Las metáforas y los sentimientos intensos vuelven a darse cita en su cine.


Por último, con algo más de un mes de retraso, se hace un hueco en la cartelera aragonesa 'Nothing personal', en la que la directora Urszula Antoniak reflexiona sobre la soledad a través de la peculiar relación entre una joven vagabunda (Lotte Verbeek) y un ermitaño (Stephen Rea) que le ofrecerá trabajo a cambio de comida. La película arrasó en el Festival de Locarno de 2009.