ARTE DIGITAL

Goya toma el mando de la Playstation

El dibujante Moratha crea, en edición digital, un cómic "divertido y didáctico" dedicado al pintor que se traslada al siglo XXI.

Goya toma  el mando de  la Playstation
Goya toma el mando de la Playstation

José Antonio Moratha (1970) es un dibujante de cómic, vinculado al colectivo Malavida, capaz de crear un personaje como Mariano, 'el porrero medieval', que igual se va al país de las hadas que ilustra la novela 'La escarcha sobre los hombros', de Lorenzo Mediano. Ahora, acaba de realizar un nuevo tebeo o novela gráfica sobre la vida de Francisco de Goya, "un cómic de humor" que solo está disponible en edición digital en Editorial Saure, que apuesta por los formatos digitales.

Dice Moratha: "Aparece un Goya distinto. A través de diversos viajes en el tiempo se traslada a la época actual y el pintor se tiene que enfrentar a las nuevas tecnologías: el cine, internet, el ordenador, la cámara fotográfica, los grafitis, la 'Play'... En cierto modo me pregunto: ¿qué haría Goya si viviese ahora?". La obra está concebida con un desarrollo cronológico, "como una historia continua, dividida en tres partes: el Goya joven, el adulto, que se consolida como retratista, y el Goya viejo, cuando era un sordo un poco cascarrabias. Toda la trama transcurre en Zaragoza, así que aparece la ciudad tal y como era en el siglo XVIII y a principios del XIX, y aparecen personajes reconocibles del momento". En uno de sus viajes en el tiempo, ya en pleno siglo XXI, el pintor de Fuendetodos se aloja en la casa de un joven zaragozano: Goya le enseñará las técnicas de la pintura y del grabado, y el joven le introduce en su universo tecnológico.

Moratha dice que ha realizado un cómic fresco, repleto de gags, "pero tratado siempre desde el respeto y la admiración que le tengo a Francisco de Goya. Yo creo que ha quedado un cómic divertido y muy didáctico, para todos los públicos". Insiste en que abundan los gags, algunos "al estilo Mortadelo": en uno el artista viaja al futuro tras tirar el ácido que emplea para sus grabados; en otro, mientras le hace un retrato a Carlos III, que tiene un perro a sus pies, entra un gato y se produce un maremágnum de gritos, movimientos y caídas. Añade Moratha: "En otras páginas, Goya pasa por un parque donde están unos grafiteros haciendo de las suyas. El pintor, al ver lo mal que pintan, les agarra los esprais y les hace una de las 'pinturas negras'. Los grafiteros quedan alucinados. Y hay muchas escenas en las que se ve a Goya como poca gente se lo habrá imaginado: pintando bares, usando la Playstation (lucha contra los franceses en un jueguecito), haciendo caricaturas en un parque?". Un día Goya y el joven contemplan la ciudad, y el muchacho le muestra hoteles, pastelerías, bares o aparcamientos que llevan el nombre de Goya. Le dice: "Eres muy famoso. Todos quieren tener tu nombre para sus negocios".

Moratha, con un ejemplar de 'Mariano, el porrero medieval'. heraldo