CONCIERTOS

Una excepcional Temporada de Primavera que será difícil de olvidar

Los responsables del Auditorio merecen un encendido aplauso por la calidad de la programación en estos tiempos tan difíciles.

Finalizó la XVI Temporada de Grandes Conciertos de Primavera, que ha supuesto un nuevo hito en la trayectoria del Auditorio, con actuaciones de grandes grupos orquestales que permanecerán en la memoria de los aficionados durante mucho tiempo. Han sido 10 sesiones de abono y 3 fuera de carnet, con novedades tan importantes como la presencia de la Orquesta Filarmónica de Berlín, que no había actuado en nuestra ciudad desde hacía más de 60 años.

A las órdenes de Simon Rattle, con Mitsuko Uchida al piano, y en medio de una enorme expectación, interpretaron la 'San Francisco Polyphony', de Ligeti; el 'Concierto para piano nº 4', de Beethoven, y la 'Sinfonía nº 2', de Sibelius. Fue el miércoles 24 de febrero, con un lleno hasta la bandera. La sensación general fue de acontecimiento único.

El ciclo había comenzado poco antes, el viernes 12, con otra orquesta de primerísimo orden, la del Royal Concertgebouw de Ámsterdam, en manos de uno de los directores más cotizados del momento, Mariss Jansons, estando al violín otra estrella rutilante del firmamento musical, Janine Jansen. El 'Concierto para violín en re menor', de Sibelius, fue de otra dimensión, y la 'Sinfonía nº 4' de Brahms dejó sensaciones difíciles de describir.

Dando un gran salto cronológico, vamos a la fecha más reciente, la del pasado 2 de junio, con la actuación de otra orquesta estelar, la London Symphony, dirigida por Daniel Harding, con un solista de excepción a la trompeta: el sueco Hakan Hardenberger. En medio de dos obras 'clásicas', el preludio de 'Tristán e Isolda', de Wagner, y la 'Sinfonía nº 2, Asrael', de Suk, apareció una oportunidad para abrir horizontes en el gusto musical de los aficionados: el concierto para trompeta 'Aerial', del contemporáneo Heinz Karl Gruber, de enorme riqueza armónica y tímbrica.

Actuaciones memorables

Actuaciones memorables fueron también las de la Filarmónica Nacional de Rusia, con Vladimir Spivakov, el 16 de marzo; Filarmonía de Dresde, el 13 de abril, con Rafael Frühbeck de Burgos en el podio y Joseph Colom al piano; Orquesta de Cadaqués, el 30 de abril, con Gianandrea Noseda y la voz de Ainoa Arteta; Al Ayre Español, de López Banzo, el 3 de mayo, en una soberbia versión de 'Las bodas de Fígaro' de Mozart; Orquesta Filarmónica Checa, el 13 de mayo; y Staatskapelle de Weimar, con el Orfeón Donostiarra, bajo la dirección de Leopold Hager. No faltó la tradicional 'Pasión' bacchiana en las vísperas de la Semana Santa (20 de marzo), correspondiendo esta vez la de 'San Mateo' a cargo de The Scholars Baroque Ensemble con la sección infantil de Amici Musicae, dirigidos por David van Asch.

Un homenaje a Montserrat Caballé, festejando los 50 años de su carrera musical, tuvo lugar el 12 de abril. Completando programa, la Oslo Camerata había actuado el 2 de marzo, y la Orquesta Sinfónica del Conservatorio Superior de Aragón, dirigida por su titular, Juan Luis Martínez, el 22 de marzo, con la contralto Sabine von Bayern, interpretando la 'Sinfonía nº 4' de Mahler y el 'Cuarteto para cuerdas y piano, Op. 25', de Brahms, en orquestación de Schönberg. No desentonó nuestra orquesta en un ciclo de esta categoría.

Sorprendente el nivel artístico de toda la XVI Temporada recién concluida. El director, los gestores y los programadores del Auditorio, que en estos tiempos de penuria económica se las ingenian para ofrecer programas de tanta enjundia, merecen un encendido aplauso.