RECOGE 1.620 AUTORES

Javier Barreiro concluye tras cinco años el totalizador 'Diccionario de autores aragoneses'

El proyecto, que ha sido financiado y publicado por la DPZ, abarca desde 1885 a 2005. Consta de 1.620 autores y abarca 1.200 páginas.

El autor, Javier Barreiro
El autor, Javier Barreiro
OLIVER DUCH

"Con la publicación del 'Diccionario de Autores Aragoneses Contemporáneos 1885-2005', se trataba de desbrozar casi un siglo y cuarto de producción de libros creativos publicados por autores aragoneses en un periodo en que los cambios sociales, industriales y económicos, modifican por completo el panorama anterior. La gran mayoría se trata de obras y autores que no han tenido relevancia pero también están los que sí la han tenido y los que, sin tenerla, hubieran merecido otra suerte", explica Javier Barreiro (Zaragoza, 1953), director de este proyecto en el que se han invertido 240.000 euros y casi cinco años, en el que ha contado con la colaboración del documentalista Francisco Ruiz Pérez. El libro, que se edita en un solo volumen de casi 1.200 páginas, "es un catálogo que relaciona todo lo que buenamente se ha podido consignar en cuanto a nombres, obras y bibliografía, una puesta al día personal, como no puede ser de otra manera, del juicio que puedan merecer los autores más relevantes y, sobre todo, un instrumento que escanea la historia social y literaria de Aragón" en un momento en que se están produciendo nuevos cambios.

Criterios

En el 'Diccionario?' figuran todos los autores nacidos en Aragón, "aunque hubiesen vivido poco tiempo en su territorio, pero también quienes han residido en él, al menos durante el periodo en que hubieran publicado alguna obra de calado literario". El término 'autor' se entiende en un sentido "más bien abstracto y medianamente ambiguo que hace referencia a quienes hubiesen publicado un libro de creación".

Por ello, el 'Diccionario' excluye a los firmantes de "obras ensayísticas, eruditas, recopilatorias, científicas, didácticas" o de otro signo no creativo. Cada autor, para poder figurar, debe haber publicado al menos un libro o haber estrenado una obra teatral. El volumen abarca 1.781 fichas, 161 son seudónimos, con lo que se incluyen 1.620 autores literarios.

Barreiro matiza que va a haber pocas sorpresas: "La cantidad de raros y 'desconocidos' es amplia. Recuerdo a Vicente Lacambra, que pasó casi diez años en la cárcel por un crimen que cometió su hermano y que murió en el exilio mexicano, a Miguel Ezquerra, último defensor de la cancillería hitleriana y cuya vida es una película, o a los varios que sobrevivieron a Mauthausen, Gusen y Dachau y hubieron de contarlo. Se han localizado también obras de cuya existencia se dudaba y se han adjudicado a sus autores, se han desvelado seudónimos que no se sabía a quién pertenecían? Con todo, lo mejor es que hay cientos de autores que dan para tesis doctorales que habrán de partir de este diccionario".

Indica el profesor y escritor Javier Barreiro que con el monumental diccionario de Latassa y la ampliación del de Gómez Uriel de 1885-1886, "las letras aragonesas son hasta esa fecha las mejor catalogadas y conocidas de todas las peninsulares. Con este volumen lo son también en la época contemporánea porque a pesar de que hay decenas de diccionarios que se ocupan de literaturas regionales o provinciales, no existe ninguno con la exhaustividad de este". Recuerda que en un proyecto semejante en Cataluña ha intervenido 110 autores.

La elaboración del 'Diccionario' empezó con el voluminoso material que el propio Javier Barreiro había reunido "a lo largo de mi vida, procedente del vaciado de veinte mil volúmenes y también de un inmenso material hemerográfico que había dado lugar a bibliografías e innumerables fichas y referencias -afirma-. Empresas tan ambiciosas no pueden partir de cero". Se repasaron las principales bibliotecas aragonesas, se siguió la pista de los emigrados y exiliados en México, Argentina, Santo Domingo y Cuba, especialmente, y se indagó en catálogos, bibliotecas privadas, librerías de viejo, editoriales, las bases de datos y los diversos fondos digitalizados.

Tierra de ensayistas y periodistas

A modo de conclusión acerca de las características más acusadas de los casi dos mil autores, observa Javier Barreiro: "Aragón es tierra de ensayistas y de periodistas. Empezando por Martínez Salafranca y Nipho y siguiendo por Eusebio Blasco y Mariano de Cavia, aragoneses han sido muchos de los grandes periodistas españoles. En cuanto a la erudición, especialmente en el ámbito literario, es impresionante el elenco de primeras figuras dado por Aragón en los últimos ciento cincuenta años. Aquí aparecen solo aquellos que, como Cejador, Costa, Camón Aznar, Manuel Alvar, Lázaro Carreter y algunos más, han publicado obras de creación".

Aunque no cabe hablar de revelación alguna en la nómina, sí hay una figura incuestionable: Ramón José Sender, al que sitúa al lado de Baltasar Gracián, el gran escritor del Barroco. "Sin duda, Sender es la figura señera y, a bastante distancia, hay unas decenas de buenos autores pero no puede decirse que la literatura hecha por aragoneses haya sido especialmente brillante en este periodo, sobre todo si la comparamos, con la escrita por andaluces, gallegos, vascos, madrileños...".

Barreiro está especialmente contento. El 'Diccionario' se presentará el día 5 de abril. "Todos los desvelos los doy por bien empleados porque, de no ser por la sensibilidad de la Asociación Aragonesa de Escritores, que promovió el diccionario, la DPZ, que lo financió y lo edita, y la DGA, que me ha permitido dedicarme a esto, el trabajo de una vida hubiera quedado inédito".

Ramón J. Sender. "Sin duda, Sender es la figura señera de la literatura aragonesa y, a bastante distancia, hay unas decenas de buenos autores", sostiene el autor del 'Diccionario'.

Balsatar Gracián. Barreiro equipara al gran escritor del Barroco con Sender para la época actual.

El autor. Javier Barreiro acometió esta obra en 2005, con un plazo inicial previsto de 42 meses.