.

La rebelión 'Nerd'

Tendencias. Arrasa en EE. UU. y llega a España ¿The Big Bang Theory¿ (Neox), el último ejemplo de la redención del pardillo.

(1) Ross: se llevó a la chica (2) Glee, la apoteosis (3) The Big Bang Theory, a vueltas con la rubia (4) Desi, la prisionera patria (5) Flight of the Conchords, el musical (6) Kyle XY, el nerd que no lo parece (7) Urkel, el inolvidable.
La rebelión 'Nerd'
HA

Ni Javi ni Pancho ni el Piraña ni, desde luego, la perfectoide y bella Bea protagonizarían hoy en día una hipotética segunda parte de ‘Verano azul’. Lo haría Desi. Sus ‘brackets’ serían ahora mil veces más imitados que las mangas con flecos de Bea, y sus gafas, más deseadas que la melena de su amiga. Porque en 2010, los guapos apestan. El siglo XXI no ha asistido a ninguna odisea del espacio como elucubró Kubrick, pero sí a un cambio sin precedentes en la cadena evolutiva adolescente, a un teremoto en el ecosistema de los institutos:_en el tercer milenio el guay es el empollón gafotas. Como cualquier fenómeno a escala mundial, tiene ya acuñado un término en inglés que lo denomina y que no es otro que nerd. No hay aún acuerdo sobre los motivos de semejante redención pardilla, pero sí algunas pistas que ayudan a entenderla. Saquemos nuestra calculadora y nuestro boli de dos tintas del bolsillo de la camisa y tratemos de arrojar luz.


1) Internet. Se antoja como clave en todo este asunto. El descubrir a través de Google que no eres el único nerd del Universo, que hay otros gafotas marginados como tú, puede dar alas, sobre todo a almas heridas. Y_no solamente eso. Resulta que el hombre más rico de la tierra, un tal Bill Gates, es un nerd de tomo y lomo. Por no hablar de otros cerebrines detrás de Apple o Facebook (sí, el que lo inventó lleva chanclas de Adidas con calcetines).


2) La tele. Las salas de los guionistas de televisión (sobre todo, en Estados Unidos) son un auténtico hervidero de nerds. El fenómeno ha pasado de un lado a otro de la cámara y se han convertido en los protagonistas. Puede que fuera una señal que uno de los nerds televisivos más recordados sea negro, el irritante Steve Urkel. Ahora, en la era Obama, sus sucesores llenan amplias franjas de la parrilla con el aplauso de la audiencia... ¡y de la crítica! Los disfuncionales protas de ‘Glee’, serie de la que ya hablamos en este suplemento, se han llevado un carro de Emmys y de Globos de Oro, y ahora llega a España (a Neox) ‘The Big Bang Theory’, un bombazo al otro lado del charco en el que un ombliguista físico cuántico lidera un grupete de patéticos locos por la rubia de turno. Pero hay más ejemplos, como ‘Chuck’, la impagable y musical ‘Flight of The Conchords’ o la inglesa ‘The It Crowd’. La ‘vanguardista’ ficción nacional, mientras, sigue ajena a la tendencia y los feos siguen reducidos al papel de secundarios y mejores amigo del mazas o la guapa.


3) La moda. Quizás lo más llamativo del fenómeno nerd es su encendido recibimiento por parte de los diseñadores que, rizando el rizo, han convertido la caspa en ‘fashion’. También el gafapastismo ‘indie’ ha recibido con los brazos abiertos a la pandilla basura. Marc Jacobs, Gucci, marcazas como American Apparel o H&M se han rendido a la estética nerd: camisas abrochadas hasta arriba, bermudas, corbatitas, chaquetas de punto y, sobre todo, los gaforrios (si son Ray Ban, mejor).