Daniel Brühl, Alberto Amann y Marta Etura rodarán 'Eva' en el balneario de Panticosa

Santa Irene es un pueblo imaginario de España donde siempre hay nieve. Hay también una universidad, a la que regresa un investigador llamado Álex (Daniel Brühl), para retomar un proyecto robótico que comenzó siendo estudiante años atrás. En Santa Irene se reencuentra con su hermano David (Alberto Amann) y conoce a Eva (Claudia Vega), una niña que padece amnesia a raíz de un accidente.

Este es el punto de partida argumental de 'Eva', el primer largometraje del director Kike Maíllo (de 34 años), que empezó a rodarse el 11 de enero en Suiza y que dentro de unos días convertirá el balneario de Panticosa en un plató. Durante dos semanas y media, en febrero, Maíllo y los citados actores -a los que hay que añadir a Marta Etura, que encarna a la madre de Eva- filmarán en Formigal y en el balneario, con la colaboración de unos 150 extras seleccionados en cástines en Sabiñánigo y Huesca.

Toni Carrizosa, director de producción de 'Eva', explicaba ayer a HERALDO desde Suiza que la idea de rodar en el balneario oscense fue de Aíntza Serra, productora ejecutiva y una de los guionistas de 'Eva' (junto al dramaturgo Sergi Belbel, Cristina Clemente y Maí-llo). "Aíntza tiene una casa cerca de Panticosa y conocía el balneario", explica Carrizosa, que indica que el lugar encajaba a la perfección.

"La película se ambienta en un futuro no muy lejano, como dentro de 40 años, y Kike tiene una visión de ese futuro unido al pasado, no lleno de edificios de cristal y coches volando, sino con cosas antiguas. Como ahora, que te encuentras edificios del siglo XVIII aunque dentro haya Internet", describe el director de producción. Por eso, el balneario era idóneo: combina elementos con sabor histórico como el casino con otros modernos (Carrizosa cita las pasarelas de Moneo). Y, por supuesto, está todo lo nevado que requería el guión.

Además, Carrizosa cuenta que poder rodar en España "abarata costes y para nosotros es más fluido, porque todo el equipo es español". Como anécdota, explica que en Suiza se sienten "en la torre de Babel". "El otro día, rodando con 'steadycam' (cámara con un sistema de estabilización) y helicóptero, utilizábamos cinco idiomas diferentes: castellano y catalán entre los del equipo, inglés y francés para entendernos con la gente de Suiza... e italiano porque el operador de la 'steadycam' era italiano".

Algo parecido a lo que debió de vivir el protagonista, Daniel Brühl, con Quentin Tarantino en 'Malditos bastardos', que también contaba con diálogos y equipo de varias lenguas. Brühl, nacido en España pero crecido en Alemania, tiene en su haber 'Goodbye, Lenin', 'El ultimátum de Bourne' o 'Krabat' (que se estrena mañana en España).

En 'Eva', Brühl compartirá planos (y triángulo amoroso) con otros dos jóvenes talentos, ambos candidatos al Goya este año por sus interpretaciones en 'Celda 211': Alberto Amann y Marta Etura. Un espléndido reparto que se completa con el veterano Lluís Homar ('Los abrazos rotos', 'Cobardes'), que será el mayordomo de Álex, y la francesa Anne Canovas, que trabajó con Robert Altman en 'Van Gogh' y 'Prêt à porter', y que aquí encarnará a Julia, la directora del centro donde trabaja Álex.

"Hemos tenido mucha suerte, hemos conseguido los actores que queríamos y técnicos muy buenos", reconoce Toni Carrizosa, pero aclara que no todo es fortuna: "El guión está bien escrito y es interesante, y hace dos años rodamos en Andorra un 'teaser' (una especie de tráiler de muestra) muy chulo con otros actores. Además, en España no hay muchas posibilidades de hacer un filme de ciencia ficción. Es un reto".

'Eva' es una producción de Escándalo Films, productora vinculada a la Escuela de Cine de Cataluña que se dedica exclusivamente a sacar adelante proyectos de nuevos realizadores. Tiene 4,5 millones de euros de presupuesto y cuenta con financiación de Canal + Francia, TVE, el ICAA y la televisión de Cataluña, entre otras.