CINE

Hollywood premia a su rey

James Cameron, ganador de los Globos de Oro
Hollywood premia a su rey
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Los Globos de Oro estuvieron muy repartidos, como casi siempre, pero un nombre sobresalió por encima del resto, el de James Cameron. Se llevó el galardón al mejor director y su taquillera superproducción, ¿Avatar¿, fue elegida mejor película. La prensa extranjera de Hollywood apostó por la comercialidad y quiso premiar a un largometraje que significa mucho para la industria estadounidense. Por sus mareantes cifras de recaudación (como saben, va camino de ser el filme más taquillero de la historia) y porque, con sus revolucionarios efectos digitales, puede marcar un antes y un después en el cine. Una propuesta que ofrece entretenimiento y un apabullante espectáculo visual, si bien para algunos hubiera sido deseable un guión más elaborado. ¿Se repetirá la misma situación en los Óscares? Pocos dudan de que como mínimo acaparará un gran número de candidaturas.


La ceremonia, bien realizada, se desarrolló de forma ágil a pesar de la infinidad de galardones y categorías, con sus correspondientes discursos de agradecimiento. Hubo, como no podía ser de otra forma, sonrisas, elegancia y glamur, y también incorrección. Esta corrió a cargo del presentador, el humorista británico Ricky Gervais (actor y responsable de la serie ¿The office¿, la versión inglesa). En sus intervenciones lanzó ácidos comentarios, riéndose de más de una estrella, y en varias ocasiones se puso a beber cerveza de un vaso que tenía escondido detrás del atril. Un modo de mofarse de las críticas que motivó el año pasado por hacer una broma similar. Asimismo, hubo tiempo para la concienciación y durante la gala se recordó la tragedia de Haití. Las estrellas llevaban lazos rojos en sus trajes y vestidos y se hizo llamamientos a la colaboración.

Sin sorpresas

No hubo grandes sorpresas, pero sí, en el caso de la representación española, dos chascos. Penélope Cruz y Pedro Almodóvar no tuvieron suerte. Su triunfo era muy complicado. En su tercera nominación, la madrileña se quedó sin estatuilla en la categoría de mejor actriz de reparto por su papel en ¿Nine¿. Fue a parar a Mo¿nique (¿Precious¿), la favorita. Y los comentarios favorables en Estados Unidos y el reconocimiento de los críticos de ese país no sirvieron para que su querido Pedro ganara. El Globo de Oro al mejor filme extranjero (en lengua no inglesa) recayó, como indicaban las quinielas, en ¿La cinta blanca¿, del maestro Michael Haneke. Sin embargo, la nominación de Cruz y Almodóvar refleja que están bien posicionados en la carrera hacia los Óscares, donde quizá esté Fernando Trueba con ¿El baile de la Victoria¿.


¿Avatar¿, ¿Up¿ y ¿Crazy Heart¿ fueron las películas que más galardones lograron. La primera, dos de los cuatro a los que optaba (eso sí, le tocaron los ¿gordos¿). El filme de animación de Pixar, como estaba cantado, ganó en su categoría y, además, en la de banda sonora. Hizo pleno, al igual que ¿Crazy Heart¿, largometraje sobre un cantante de country alcohólico y en horas bajas. Papel que le reportó el Globo de Oro al mejor actor dramático a Jeff Bridges, quien ya se ve con el Óscar en su casa. Encarna a un personaje de esos que son sinónimo de premio en Hollywood. Es la oportunidad de un intérprete al que no se le ha valorado como es debido. ¿Crazy Heart¿ también se llevó el Globo de Oro a la mejor canción. ¿Malditos bastardos¿, de Quentin Tarantino, obtuvo un galardón de cuatro posibles (el de actor de reparto a Christoph Waltz, bastante esperado y preludio del Óscar que nadie duda de que será para él) y la comedia dramática ¿Up in the air¿, con George Clooney, uno de seis. Fue en el apartado relativo al guión. Su entrega provocó el momento tenso de la noche, ya que subieron a recogerlo al escenario Jason Reitman, el director, y Sheldon Turner, enfrentados por acusaciones de plagio. En el apartado de comedia o musical, la prensa consideró vencedora a la divertida ¿Resacón en Las Vegas¿. En cuanto a las perdedoras, destaca el musical ¿Nine¿, con cinco nominaciones sin recompensa.


El nuevo Sherlock Holmes, Robert Downey Jr., triunfó como mejor actor de musical o comedia con un personaje a su medida. Y Sandra Bullock, que en 2009 vivió uno de los mejores años de su carrera, fue premiada por su sorprendente registro dramático en ¿The blind side¿. También optaba al galardón como actriz comedia (por ¿La proposición¿), que fue a parar a las manos de Meryl Streep (¿Julie y Julia¿), también candidata en esa categoría por ¿No es tan fácil¿. En la gala tampoco podía faltar el homenaje a uno de los grandes. Martin Scorsese recibió el honorífico Cecil B DeMille. Se lo entregaron dos actores clave en su filmografía, Robert De Niro y Leonardo DiCaprio.

Premio para 'Dexter'

En el ámbito televisivo, la atención se centró en Michael C. Hall, el psicópata protagonista de ¿Dexter¿, en la recta final de su tratamiento contra el cáncer que anunció la semana pasada. Fue el mejor actor dramático, y John Lithgow, villano de la cuarta temporada, se marchó con el Globo de Oro al intérprete de reparto. ¿Mad men¿ revalidó su título de mejor serie dramática y ¿Glee¿, ambientada en un instituto, arrebató la gloria a la veterana ¿Rockefeller Plaza¿ en el apartado de comedia o musical. Esta tuvo que conformarse con el galardón de mejor secundario a Alec Baldwin.