LITERATURA

Bombones literarios hiperbreves e internáuticos en 'Por favor, sea breve 2'

Páginas de Espuma publica otra colección de minicuentos escogidos por Clara Obligado

Clara Obligado.
Bombones literarios hiperbreves e internáuticos en 'Por favor, sea breve 2'
o. duch

zaragoza. "Esto es como comerte una caja de bombones.", dice risueña la escritora argentina Clara Obligado, que por segunda vez ha hecho para la editorial Páginas de Espuma una antología de relatos hiperbreves con autores famosos y desconocidos de ambos lados del Atlántico. Con el título 'Sea breve, por favor 2', este volumen recoge textos de escritores reconocidos -como José María Merino, Ramón Gómez de la Serna, Espido Freire, Juan Perucho o Luis Mateo Díez- junto a otros sacados directamente de Internet, piezas que se encuentran por primera vez en papel y que en ocasiones son de gentes cuyo nombre no le suena ni a los lectores empedernidos.

Tal es el caso, por ejemplo, de la zaragozana Patricia Esteban Erlés. "Más internáutico no pudo haber sido. Clara me escribió a Facebook, porque había leído mis cuentos en el blog, y me pidió permiso para publicarlos. Y, después de desmayarme, se lo di", recueda la profesora zaragozana, que da clases de Lengua en el instituto Elaios y desde hace cinco años publica sus pequeñas historias en 'toditoslosdias.blogspot.com'. Siguieron sin conocerse cara a cara hasta que, en la presentación del libro en Madrid, Obligado mencionó que había cuentos de "gente a la que no había visto jamás, y ella levantó la mano", recuerda la argentina, que se se encontró así en persona con la aragonesa.

En el libro hay más gente de nuestra tierra. Para ser exactos, tres, más uno de adopción (el uruguayo Fenando Aínsa). El trío lo forman Javier Tomeo -al que Obligado confiesa haber olvidado de forma imperdonable en la primera recopilación de minicuentos-, Ramón Acín e Isabel González, de la que incluyó en el último momento el relato 'Numeración incorrecta'.

"Ya estaba cerrando el libro y me recomendaron que lo leyera. Dije: ¡Paren la máquina! Es un cuento sorprendente que viene directo de la Red", explica Obligado, que -sin embargo- no ha incluido ningún relato propio porque reconoce con modestia que "es un género demasiado difíci y para escribirlos hay que tener una manera de ser que yo no tengo". Lo que sí se ha permitido es un ingenioso colofón humorístico muy serio.

Obligado y Esteban coinciden en que un cuento hiperbreve surge "como una estrella en el bolsillo" o "un relámpago, un destello que contiene su propia historia". En 'Por favor, sea breve 2', los cuentos se ordenan de mayor a menor extensión (el más largo tiene 36 líneas y el más corto, titulado 'El fantasma', ninguna).

Aparte de un índice onomástico que permite buscar si se desea los relatos por su el nombre de los escritores, el libro contiene también referencias bibliográficas de estos (por si alguien se anima a leer cosas más largas) y un breve capítulo de 'Los autores recomiendan' en el que diez de los escritores eligen sus minicuentos favoritos.

Obligado, para quien "decir en 500 páginas lo que se podría contar en 200 es una descortesía", subraya que los autores incluidos en esta antología "no cuentan más de lo que se debe. Son muy bien educados y dicen exactamente lo que hay que decir, porque este es un género que s eompleta en la imaginación del lector". Y es que "la novela puede tener un lector vago, pero el relato hiperbreve jamás". sentencia la argentina.