ENTREVISTA

Joan Manuel Serrat: "Hay chabolas que son hogares, y palacios que jamás lo serán"

Joan Manuel Serrat.
Joan Manuel Serrat: "Hay chabolas que son hogares, y palacios que jamás lo serán"
BERRY PRODUCCIONES

Antes de comenzar, permítame que le abrace. Es un ruego de un amigo suyo y mío: Raúl Aranda.

¿El matador?

 

El mismo. Ya sabe que es un hombre de firmes convicciones.

Le ruego se lo devuelva. He pasado muy buenos momentos con él. Sé de su vida. Me alegra enormemente que se encuentre bien.

 

Usted también es un apasionado de los toros.

Lo era hasta que tuve amigos toreros. Sufría demasiado por ellos.

 

En Barcelona peligraron los toros. Esquerra Republicana pretendía prohibirlos.

Tengo otras preocupaciones, problemas que sufre la gente, como el paro, la crisis.

 

¿Qué puede arreglar usted con su voz y su guitarra?

Las soluciones hay que buscarlas desde los errores. La música no modifica los problemas hipotecarios. Tienen que arreglarlo los mismos que la han jodido.

 

¿Las verdaderas cornadas las da la vida?

Paco Camino decía que más cornadas que los toros daba el andamio.

 

Usted acaba de hacerle un quite al cáncer.

Allí se demuestra lo efímero, lo imprevisible que puede ser todo. Sirvió también para darle valor a las cosas cotidianas, a lo esencial de la vida.

 

¿Qué tal se encuentra Juanito, que es como le llama Raúl Aranda?

Fenomenal. Paso revisiones cada seis meses. Estoy impecable de motor, de chasis y hasta de los bajos (sonríe). Juanito me llamaba mi madre.

 

Ni Joan Manel ni Juan Manuel: Joan Manuel, deliciosa e integradora mixtura catalano-castellana.

En el Registro Civil figuro como Juan Manuel. Me pusieron así por mis abuelos maternos, Juana y Manuel, que eran de Belchite.

 

Su contacto con Aragón ha sido intenso.

Pasé muchos veranos en Belchite. Sobre todo, recuerdo la calle Santa Teresita, en el barrio de las Delicias de Zaragoza. Allí tenía su lugar mi tía, la hermana de mi madre. Hay chabolas que son hogares, y palacios que jamás lo serán. Esa casa fue mi hogar.

 

Con estos antecedentes aragoneses, ¿por qué nunca le dio por cantar jotas en su repertorio?

Yo he cantado jotas. Por ejemplo, en mi primer disco aparece la canción 'Cançó de Bressol'. Es una nana en la que como estribillo aparece una jota que cantaba mi tía. Decía así: "Por la mañana, rocío / al mediodía, calor / por la tarde, los mosquitos / no quiero ser labrador".

 

Usted se expresa en catalán. Moncho Alpuente dice que sus canciones significan una razón sólida para aprender este idioma.

El conocimiento amplía las posibilidades de aprender.

 

No hemos hablado nada de fútbol: de su Barça, que también nació en el Mediterráneo.

Ha sido maravilloso. He gozado muchísimo, además de haber obtenido unos resultados fantásticos. También se ha salvado Osasuna. Para que la felicidad sea completa, solo necesito que el Zaragoza suba a Primera cuanto antes.

 

Visitará Zaragoza el próximo viernes. ¿Qué Serrat vamos a ver?

Un hombre feliz que cantará en un lugar que quiere. Será un concierto en carne viva, al desnudo, con dos instrumentos en cada canción, en un clima cercano, con la complicidad de siempre.