CINE

La oferta de descarga legal de películas en la red aumenta, pero no logra convencer

Las limitaciones de visionado y el coste extra por conservación de los archivos después de bajarlos frena el interés de los usuarios.

La descarga legal de películas por Internet está aún dando los primeros pasos. Algunos son curiosos, como el que han protagonizado hace unos días la popular web Youtube y los estudios Metro Goldwyn Mayer. Un acuerdo para ir colocando parte del catálogo de MGM en la web, que comienza con episodios de ‘American Gladiators’ y películas como ‘Bulletproof Monk’ o ‘Los siete magníficos’, acompañadas de publicidad.

Youtube también ha llegado a acuerdos con Lionsgate y CBS, lo que supondrá disponer en línea de ‘Star Trek’ o ‘Sensación de vivir’. Es el penúltimo paso de una tendencia que tiene otro tipo de oferta.

 

Alternativas de factura española como Accine (avalada por la SGAE), Filmotech, o Pixbox suponen la adaptación a los nuevos tiempos, que han traído la práctica desaparición de los videoclubs de formato tradicional.


Accine (www.accine.com) es la pionera. Utiliza el formato de ‘streaming’ -visionado sin descarga- y funciona por bonos y créditos. Una película puede costar entre 9 y 19 euros, según actualidad, y se ofrecen bonos de 33 a 140 créditos, con un precio medio (cuanto más se compra, más barato el crédito) de 0,25 euros por cada crédito. También se permite el alquiler unitario. Las películas se ven en Windows Media Player y, con el cableado RCA -las clavijillas de colores-, SVIDEO o el VGA -más calidad, habitual para los televisores de alta definición-.


Pixbox (www.terra.es/pixbox), asociada a Terra, es un videoclub en toda regla, aunque aún es más popular como tienda virtual de música, con su servicio de música sin límites a 6 euros mensuales. Vende y alquila series de televisión y películas, con alquileres entre 1 y 3 euros con visionados limitados, hasta compra (de 4 a 17 euros).

 

Las licencias

 

La limitación se efectúa por el sistema DRM (Digital Rights Management, rebautizado Manejo Digital de Restricciones) de Microsoft, que impide el copiado posterior y limita los visionados de las películas por cantidad o tiempo, según la oferta elegida. Exige la descarga de un programa gratuito. En otros países y para el supuesto de compra definitiva, este servicio incluye el envío posterior del DVD físico por correo, como ocurre con el ofrecido en Francia por TF1.


El servicio de Filmotech (www.filmotech.com) es la sublimación del sistema de visionado en España. Sublimación con muchos matices, claro: la oferta comprende el 7D -visionado ilimitado durante una semana-, que permite ver la película todas las veces que se quiera durante los siete días siguientes al primer visionado. El TPS -Tuya Para Siempre- que en el entorno anglosajón es DTO -Download To Own- tiene un solo límite, el aparato en el que se pueden ver las películas: dos ordenadores, cifra que aumenta si se compran más licencias. La oferta inicial sedujo a muchos usuarios hace año y medio: el visionado de 250 películas por un euro, con superabundancia de títulos clásicos y una excelente colección de cine español. Hoy existe un clamor hacia las limitaciones derivadas del DRM.

 

Movielink, el gigante USA

 

La página de descargas legales de cine más famosa de Estados Unidos es Movielink. La compró Blockbuster, la famosa cadena de alquileres de vídeos y juegos que se instaló brevemente (ya cerró) en España. Para el gigante de los alquileres en Estados Unidos, Movielink ha sido un salto hacia adelante, una exitosa plataforma de reingeniería en el negocio, que cada vez es más popular entre el público.