MÚSICA

Carmen París: "Cuanto más indagas en la música cubana, más se parece a la jota"

La aragonesa Carmen París saca nuevo disco, "Incubando", el 13 de mayo, tres años después de "Jotera lo serás tú". Un álbum con amplia y diversa presencia de la música cubana y sorpresas de relieve, que tendrá su presentación a lo grande el 20 de junio en la Expo.

Incubando" (Warner) llega a las tiendas el 13 de mayo. Es la tercera pica discográfica de Carmen París en el Flandes de la música española, tras aquel aldabonazo llamado "Pa' mi genio" (2002) y el reivindicativo "Jotera lo serás tú" (2005). Ahora Cuba lo tiñe todo, y la multiplicidad de géneros que caracteriza a la aragonesa estalla en mil direcciones. Está contenta, y se le nota. Además, los problemas de la industria se los pone por montera: con este disco quiere llegar más lejos.


El pollito está a punto de romper la cáscara. ¿Cómo ha ido el proceso de incubación?


Movido, interesante. En este trabajo uso todo tipo de recursos, pero en cada canción hay un toque cubano puesto de manera diferente. Musicalmente, cuanto más indagas en la música cubana, cuanto más te remontas, más se parece a la jota.


Hay un poema de José Martí hecho canción, "Por Aragón".


He invitado a Ludmila Mercerón, cubana y residente zaragozana, a cantarlo conmigo y con Haydeé Milanés, la hija de Pablo. Mariano Mercerón, padre de Ludmila, está considerado como el rey del danzón, y Haydée tiene sus raíces claras. Me parecían ambas muy apropiadas para cantar el poema de Martí, así que las he puesto a jotear, jeje...


El disco nace en Cuba. ¿Qué aporta la realidad palpable de la isla más grande del Caribe a este trabajo, música aparte?


Se ha compuesto a lo largo de cuatro meses el año pasado, en distintas estancias. Allí viví una vida de barrio, me empapé de la dinámica cotidiana de la gente. Es surrealista, sí, tan diferente de la nuestra y, al mismo tiempo, te das cuenta de que nos unen muchas cosas. A pesar del fin de las llamadas prohibiciones estúpidas, lo de los hoteles y los electrodomésticos y eso, la situación está muy deteriorada y los cambios necesarios se sitúan en niveles superiores. Pero quizá gracias a eso, allí no ha llegado el Gran Hermano que tenemos aquí, y no me refiero al programa de televisión. Viven fluyendo con la vida aunque deban superar grandes dificultades.


A grabar en Lavapiés. ¿Por qué?


Elegimos un pequeño estudio en el que suelen trabajar los productores del disco. Son Ismael Guijarro y Pablo Cebrián, más flamenco Ismael y más rockero Pablo. Hemos estado muy bien allí.


Diseccione un poco el disco, para los que cuentan las horas y los días hasta el 13 de mayo.


A ver. Hay una jota aguajirada que se llama "Chufla dragón", basada en el chiste de apartarse o no apartarse. También una versión jotera de la "Dolores" de Tomás Bretón, con algunos cambios y un "viaje" considerable en la parcela musical. El vídeo presentado recientemente sobre el Bicentenario de los Sitios la tiene como banda sonora. Y una versión del "Mediterráneo" de Serrat, que tenía lista desde hace tiempo por un disco homenaje en el que finalmente no estuve, por desacuerdo de mi discográfica con los productores del disco. Al fin y al cabo soy muy mediterránea, pero le he dado un toque de tierra adentro. La han versionado tantas veces que quería hacer algo un poco distinto.


Son doce las piezas del disco. Hay una medio rumbera, "El caramelo", que se queda en la cabeza al instante.


A ver cómo funciona. Tengo un rap llamado "De muy buen ver", una pieza que habla de la omnipresencia de las tetas en las portadas de las revistas y del culto a la imagen. Hay un tema con un ritmo mozambique, muy popular en Cuba, y otro que sigue la clave del bembé, "Agua que ha de correr", inspirado en el tao, en la figura masculina como cauce y la femenina como agua. En la edición digital habrá un tema extra.


Con el popurrí final de "jotas guarras" va a alucinar más de uno. Ojo con la pegatina de "explicit lyrics"...


En Madrid flipan, dicen que cómo me atrevo. Me he basado en la recopilación que hizo Aransay, en cuya interpretación participé en el volumen dos. Es una selección fina y elegante, ¿eh? Y me encanta la capacidad de esos cuatro versos para generar imágenes.


Después de este batiburrillo, ¿se despegará de Carmen París la etiqueta de jotera "kitsch"?


Trato de trascender las etiquetas, pero es complicado que no te califiquen. No soy jotera: normal que se enfaden los joteros cuando me llaman así. Lo que quiero es proyección internacional, creo que en América Latina y Francia hay mercado para lo que hago, pero tendré que vender bien en España para que me lleven allá. El disco de oro es 40.000, ¿no?