El escultor aragonés Ángel Orensanz esta terminando en Zaragoza una escultura esférica para el centro de negocios World Trade Center de la ciudad de Zaragoza, que se inaugura el próximo 16 de abril. En dicha escultura, su autor recapitula quince años de elaboración conceptual de la esfera, que ha llevado a todos los rincones del mundo: desde Nueva York, a Tokio y desde San Petersburgo al Prado de Madrid.

El Worl Trade Center (WTCZ), situado en el zaragozano barrio del Actur, de 60.000 metros cuadrados, tiene tres torres de gran altura, y dos de ellas alcanzan los 77 metros. En este complejo de oficinas y centro de negocios, Grandes Áreas Comerciales de Aragón y Bemo Servicios, se han invertido 72 millones de euros.

"La esfera de Zaragoza es la síntesis de su visión del cuerpo perfecto, que es la esfera, con la complejidad de su interior, en el que hierve y se rehace una humanidad siempre inacabada", comenta Orensanz.

La escultura ha sido encargada al artista aragonés por el WTCZ y está siendo realizada en acero inoxidable, con un radio de 3 metros y medio. Se instalará a la entrada de dicho edificio, sobre una gran lámina de agua.

Angel Orensanz vio en la mañana del 11 de septiembre de 2001, desde las ventanas de su propio estudio de Nueva York, ciudad donde reside, el atentado de las torres gemelas del World Trade Center. Poco antes había estado filmando dentro de su fundación un documental con su esfera. Días después completaría esa filmación interrumpida desfilando con su esfera por la Quinta Avenida, desde las puertas del Museo Metropolitano hasta las ruinas del World Trade Center, en un "paseo de meditación".

Al año siguiente fue el único artista autorizado a llevar a cabo una instalación que consistió en hacer descender su esfera hasta la base de las ruinas del World Trade Center neoyorquino para la película 'Burning Universe'. La instalación de Zaragoza está prevista para ser completada a mediados del mes de junio.