PREMIOS DE LA MÚSICA

Antón García Abril, Gabriel Sopeña y Xhelazz, sin Premios de la Música

Luz Casal, Los Planetas, Chambao, Fito y Bosé, más afortunados que los tres aragoneses.

Sin tanto poderío como los de Calanda, pero con más variedad ritmica, los tambore capitaneados por Ana Yermo abrieron una gala que se prometía larga. No en vano eran 28 los galardones que anoche se entregaban en el auditorio Miguel Delibes de Valladolid, en la gala de los Premios de la Música. Aragón, esta vez, se quedó sin premios.


El maestro turolense Antón García Abril vio cómo su posibilidad de recibir el premio al Mejor Autor de Música Clásica desaparecía cuando se anunció que era para Albert Amargós, por "Movements", quien poco antes se había hecho además con el premio al mejor arreglista por "Bella enamorada", para Ana Belén.


También perdió su oportunidad de subir al estrado el aragonés Gabriel Sopeña, cuya canción en catalán "Salónica", para María del Mar Bonet, sucumbió ante "Hostessa", de Quimi Portet, que no estuvo presente para recibir el premio. Sopeña, que sí acudió con toda la ilusión del mundo, aseguraba antes del comienzo de la gala que para él era "fantástico ser candidato", aunque comentaba con humor, que no dejaba de ser curioso tener "500 canciones en castellano y una en catalán" y aspirar al premio por ésta. En realidad, tiene alguna más en este idioma, que aprendió por voluntad propia cuando estudió en Barcelona. En Hip Hop venció Mala Rodríguez, que dejó sin premio al zaragozano Xhelazz, de Rapsolo.


La gala


La primera en recibir la estatuilla fue Pastora Soler, Mejor Álbum de Canción Española por su disco "Toda mi verdad". Con un vestido verde y oro, dijo comprender a quienes se quedan "sin discurso con la emoción". Tras ella subió al escenario, atropellado, el compositor Fernando Velázquez, autor de la banda sonora de "El orfanato", que llegó por los pelos: "Acabo de entrar por la puerta", dijo. Allí lo esperaba su premio.


Los Luar Na Lubre, de negro riguroso, recogieron su galardón al Mejor Álbum de Música Tradicional, y quisieron agradecer el premio"en un momento difícil para la música". En el apartado Revelación hubo doble premio para Conchita, como artista y autora. El Latino Revelación fue para el grupo mexicano Zoé, que llena estadios en América, y quienes dijeron tener "una carrera forjada a base de amor". Su nuevo disco, una interesante aproximación al pop psicodélico, se edita en España la próxima semana.


También hubo premios honoríficos. El más aplaudido fue Manuel Alejandro, quien dijo que "es imprescindible para escribir estas cancioncillas tener cinco hijas". Se definió como un "escribidor" de canciones que ha "ha tenido la suerte de dar con grandes cantantes como Julio Iglesias, Raphael o Rocío Jurado". Y bromeó diciendo que en sus tiempos "el verbo era robar y ahora es bajar", por las descargas de Internet. Aunque jesulinescamente confesó que pare él cantar "era como un toro", se sentó al piano y entonó alguna de sus composiciones.

El Premio de la Difusión de la Música fue para el veterano Festival de Jazz de San Sebastián. Luz Casal recibió el premio a la Mejor Canción por "Soy" y se lo dedicó "a toda la gente que ahora está mal de salud, que a lo mejor dentro de 365 días están mejor". Ha recordado que el año pasado, cuando veía esta gala, estaba "regularcilla". Miguel Bosé, ausente por celebración de cumpleaños aguda, se llevó el mejor álbum con su "Papito".