LETRAS

Gurruchaga y su muñeca hinchable presentan la última novela de Tomeo

Además de leer un fragmento de "Los amantes de silicona", anunció que podría llevar a escena otra obra del escritor oscense, "Napoleón VII", que se estrenaría en la Expo

 "Estamos en familia", decía ayer el escritor oscense Javier Tomeo mirando al público que se había congregado en La Casa del Libro para asistir a la presentación de "Los amantes de silicona", su más reciente novela. Y la ocasión resultó todo un espectáculo, pero no gracias a Tomeo, sino a su tocayo Javier Gurruchaga, que fue quien llevó la voz cantante con el beneplácito del de Quicena.


Ataviado con vaqueros, chaqueta de raya diplomática y una corbata llena de gente, Gurruchaga se dispuso a hablar de "Los amantes de silicona"... tocado con un gorro igualito al de Napoleón. ¿Excentricidad? Sí, pero con explicación: el "showman" anunció que, tras una charla con representantes de la Expo -entre ellos Paco Ortega, responsable de Programación de Espectáculos de este acontecimiento internacional- va a empezar a trabajar en "una mini ópera musical" sobre la obra de Tomeo "Napoleón VII", que podría tener su estreno mundial en la Expo. "El director catalán Xavier Albertí se ocuparía de la dramaturgia y la música no sé aún quién la haría", detalló Gurruchaga, que una vez pertrechado comenzó la loa a Tomeo y su nuevo libro.


Para empezar, definió al aragonés como "un cruce entre James Dean y Shrek" y luego le cedió la palabra. Tomeo confesó que "Los amantes de silicona" nació de "un desafío" de su editor, Jorge Herralde, que le propuso escribir una novela erótica. El escritor aceptó y confesaba ayer que, realmente, "disfruté mucho y espero que al leerla se pase un rato divertido". Resumió la obra como "una visión ácida de la excesiva mitificación del sexo en nuestro tiempo", ya que, a su juicio, es "excesiva la importancia que se le da, es algo grotesco y de mal gusto", apostilló.


Marilyn, estrella invitada


De nuevo tomó cartas en el asunto Gurruchaga, quien, antes de leer un extracto de "Los amantes de silicona", quiso convocar a la mesa a "la muñeca favorita de Basilio", el protagonista de la novela. Entonces Popocho -colega de Gurruchaga en la Orquesta Mondragón- sacó de una bolsa a Marilyn, una muñeca hinchable "réplica de Jennifer López" que fue inflando hasta que cobró consistencia, cubierta por un escueto vestido rojo.


Gurruchaga solo lamentó que, además, no estuviese presente el juguete homólogo de la mujer de Basilio, pero "no tenemos presupuesto para el muñeco de Lupercia y además en Zaragoza sois tan austeros que no hay muñecos", se justificó.