COPLA

Los restos de Miguel de Molina vuelven a su Málaga natal

Un panteón habilitado en el cementerio de San Gabriel en Málaga será el lugar donde se depositen los restos del tonadillero, que hasta ahora se encontraban en el cementerio de la Chacarita, en Buenos Aires.

Los restos mortales del artista malagueño Miguel de Molina, que descansan actualmente en el cementerio de la Chacarita, en Buenos Aires, serán repatriados a su ciudad natal con motivo de la celebración del centenario de su nacimiento. Un panteón que ya está habilitado en el cementerio de San Gabriel en Málaga será el lugar donde se depositen los restos del tonadillero, ha informado en rueda de prensa el presidente de la Diputación, Salvador Pendón (PSOE), cuya institución financiará los gastos.


Se trata de un acto "cargado de simbolismo" que se enmarca dentro del conjunto de actuaciones de recuperación de la memoria histórica que está llevando a cabo la Diputación, ha dicho Pendón, que ha añadido que, aunque no tiene fecha determinada todavía, podría llevarse a cabo en abril o mayo.


Para Pendón, Miguel de Molina, que fue nombrado hijo predilecto de la provincia de Málaga a título póstumo el año pasado, "es casi el último exiliado que vuelve a su tierra" y, aunque "desgraciadamente no pudo hacerlo en vida, ahora volverán sus restos para que sirva de recordatorio permanentemente". Ha señalado que la repatriación de los restos del artista contribuirá a curar muchas heridas "que quedan por cerrar" y que la Diputación "no va a escatimar esfuerzos para darle la repercusión que merece".


En el panteón del cementerio San Gabriel se colocará una escultura del cantante que todavía no se ha decidido como será, aunque el ente supramunicipal ya trabaja con varios bocetos.


Para la repatriación de los restos se ha contado con la colaboración del Ayuntamiento bonaerense y de la familia del cantante, ha explicado el diputado de Cultura y Educación, Fernando Centeno.

Una larga carrera


Miguel de Molina nació en 1908, comenzó su actividad artística en los tablaos y de ahí pasó a actuar en pequeños teatros de Madrid en tiempos de la Segunda República; en 1933 saltó a la fama tras participar en el Teatro Romea de Madrid en "El testamento gitano". Con él actuaron estrellas como Pastora Imperio, Vicente Escudero, Pilar Calvo, Adelita Durán y Antonia Mercé "La Argentina", y su fama llegó al punto más alto al terminar la Guerra Civil, aunque después fue utilizado por el régimen franquista y obligado por el general Luis Aranda a salir de gira por España.


En su última actuación de esta gira, en el Teatro Pavón del Rastro de Madrid, dos individuos le recriminaron su comportamiento sexual y, terminada la gala, varias personas le llevaron a un descampado, donde le golpearon con pistolas, le cortaron el pelo, le hicieron beber aceite de ricino y le dejaron desmayado.


Se prohibieron sus películas, sus discos y sus actuaciones, y se le confinó en un pueblo de Extremadura, por lo que en 1942 huyó a Buenos Aires, aunque su establecimiento definitivo en América llegó en 1946, al comprobar que continuaba la persecución.


Considerado por muchos como rey de la copla, se retiró de los escenarios en 1960 y desde entonces llevó una vida apartada en su casa bonaerense hasta que falleció el 16 de enero de 1993 a causa de un infarto. Sus restos fueron sepultados en el panteón de la Asociación Argentina de Actores del cementerio de Chacarita.