La secretaria general del Partido Popular y presidenta de la formación en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, aseguró ayer que "el único comunicado de ETA válido" para su partido y para "la inmensa mayoría de los españoles" es el que anuncie que la banda terrorista "se disuelve, deja las armas, se somete a los tribunales de justicia y pide perdón público a todas las víctimas del terrorismo".

Así lo afirmó De Cospedal en su intervención durante la Junta Directiva Provincial del PP en Guadalajara, donde pidió al PSOE "que no se equivoque" y que no tenga "ninguna veleidad" si en los próximos días se da a conocer un comunicado de ETA.

En ese sentido, señaló que el Partido Popular no va a admitir ningún comunicado que no contemple esas condiciones porque "la paz sin justicia no es una paz auténtica, y la justicia y la dignidad de las víctimas es absolutamente indispensable" si se está hablando "del fin de una banda criminal, asesina y mafiosa como es la banda ETA, se llame como se llame".

Apuesta por las vías políticas

Por su parte, el coordinador general de Izquierda Unida de Navarra, José Miguel Nuin, exigió ayer a Batasuna que "lleve hasta el final su apuesta por las vías políticas". Nuin se pronunció en este sentido en la reunión que celebró el Consejo Político de su partido, en la que incidió en que "Batasuna tiene que terminar concluyendo que el uso de violencia en democracia es ilegítimo y debe hacerlo con todas las consecuencias, por lo que si ETA no se sitúa en esa posición, Batasuna deberá públicamente rechazar, condenar y denunciar a ETA".

Si se confirma un escenario de fin de la violencia, IUN-NEB "seguirá trabajando por una sociedad reconciliada, por superar los efectos dramáticos de tantos años de terrorismo", subrayó Nuin, quien reconoció que este es "un camino largo y difícil".

Por último, el secretario general de Eusko Alkartasuna, Pello Urizar, advirió de que "se equivocan aquellos que condicionan el devenir de este nuevo escenario político a ETA" ya que, precisó, "el cambio de ciclo en Euskal Herria viene determinado por los movimientos dentro del colectivo soberanista", y no por las decisiones que tome la banda.