MANIFESTACIÓN

Una marcha convocada en un momento de fuerte disidencia interna

Fuentes de la lucha antiterrorista creen que la manifestación trata de dar aliento a los presos, inquietos ante la posibilidad de una tregua de ETA.

La marcha a favor de los presos de ETA de ayer se celebró en uno de los peores momentos para la unidad del colectivo, con más de cien reclusos que se han desmarcado de la banda y voces que desde prisión han pedido a la dirección etarra que renuncie para siempre a la violencia.

Fuentes de la lucha antiterrorista consideran que el lema de la manifestación, 'Los presos vascos a Euskal Herria con todos los derechos. Demos el paso', refleja también el ambiente de debate que vive la izquierda abertzale ante los crecientes rumores sobre un inminente nuevo comunicado de ETA. Un esperado pronunciamiento, el cuarto desde la declaración de alto el fuego del 5 de septiembre, que se espera con ansiedad en las cárceles ante la posibilidad de que la banda pueda dar nuevos pasos hacia el fin de la violencia.

Ventajas por arrepentimiento

No en vano, y acosado por la creciente disidencia, el Colectivo de Presos Políticos Vascos (EPPK), pidió al Gobierno en Nochebuena que deje de chantajearles y amenazarles a las puertas de las celdas, ofreciéndoles opciones para salir de la cárcel a cambio de dejar la banda. "Nos ofrecen opciones de salir de la cárcel y de aliviar nuestro modo de vida a cambio de dejar el EPPK, dar paso al arrepentimiento político y dejarles exhibirnos como trofeos conseguidos en un safari", aseguraba en un comunicado al diario 'Gara'.

No obstante, el colectivo de presos de ETA, que agrupa a buena parte de los 800 reclusos de la banda, anunciaba también su intención de incidir en el nuevo "camino político" abierto por la izquierda abertzale.

El comunicado del EPPK salía a la luz apenas unos días después de que un destacado grupo de reclusos etarras, entre ellos, históricos de la banda como José Luis Urrusolo Sistiaga, Kepa Pikabea y Carmen Gisasola, dijeran que en las cárceles "se están dando pasos concretos para cerrar el ciclo de la lucha armada".

En un cuestionario publicado en los diarios del Grupo Noticias, los etarras disidentes afirmaban que tanto en Batasuna como en las cárceles ya no se limitan a aceptar "lo que viene de arriba", en alusión a la cúpula de la organización terrorista.

El grupo de reclusos decía ser partidario además de que la izquierda abertzale dé pasos "más rápidos y más concretos" ya que, a su juicio, "ETA se está adaptando tarde y de forma forzada a la situación que se les plantea".

En este escenario de división, fuentes de la lucha antiterrorista aseguraron que la marcha de ayer en Bilbao trata también de dar aliento al colectivo de presos, que, después del intenso debate interno de los últimos meses, espera ahora con inquietud el movimiento de la dirección de ETA.