Rubalcaba: "La convivencia tras el fin de ETA no puede basarse en el olvido"

El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha apostado por trabajar por la convivencia ante el final de ETA pero sin permitir que se imponga el "olvido" e impidiendo que "nadie reescriba la historia".

"Nunca dejaremos de honrar a las víctimas del terrorismo", ha manifestado Pérez Rubalcaba durante el homenaje que los socialistas vascos han rendido a su compañero de partido Fernando Buesa y a su escolta, Jorge Díez, que murieron asesinados el 22 de febrero de 2000 cuando un comando de ETA hizo estallar un coche bomba en la zona universitaria de Vitoria.

Rubalcaba ha presidido este acto junto con el lendakari, Patxi López, y ambos, junto con una nutrida representación de varios partidos vascos, han arropado con palabras de ánimo a los familiares de Buesa y de Díez que han asistido a la ofrenda floral en el monolito que se erigió en el mismo lugar del atentado.

Este ha sido el primer homenaje a Fernando Buesa y Jorge Díez que se celebra después de que la banda terrorista anunciara el cese definitivo de su actividad violenta el pasado 20 de octubre. El líder de los socialistas ha reconocido que esta nueva etapa es "compleja" y que los demócratas seguirán necesitando "perseverancia, inteligencia y determinación" porque las huellas del terrorismo "son profundas y llevará tiempo borrarlas".

"El cumplimiento estricto de la ley es el único camino para lograr la paz", ha considerado Pérez Rubalcaba, al tiempo que ha añadido que el respeto a la legalidad "no está reñido con un uso inteligente" de las posibilidades del Estado de Derecho para que el "anhelado final de ETA se produzca cuanto antes".

Ha recordado durante su discurso que hubo que asumir riesgos físicos y también políticos para llegar a este momento y ha destacado los acuerdos que los socialistas supieron generar "cuanto otros los rechazaban" para combinar firmeza y voluntad de diálogo para unir a todos los demócratas.

Por su parte, el lendakari ha indicado que los terroristas "han fracasado" porque las voces que intentaron callar sigue vivas en las de todos los que decidieron coger el testigo.

López ha considerado que el acto de hoy no es uno más porque se celebra sin la amenaza de la violencia, algo que "cuesta creer", aunque ha dejado claro que los demócratas no van a caer en la trampa de "quienes tras años cobijados cómodamente a la sombra de los pistoleros o alimentándolos" tratan de hacer creer que el mérito es suyo.

"No vamos a caer en su juego. Ni presos políticos ni víctimas de todos los lados", ha recalcado el lehendakari.

También han intervenido el secretario general de los socialistas alaveses, Txarli Prieto, y, en representación de la familia de Jorge Díez, Jesús Prieto, quien ha criticado la justificación del horror por parte de la sociedad vasca que, salvo excepciones, "ha claudicado por miedo o aquiescencia ante el terror totalitario".

Prieto ha señalado que la estigmatización de las víctimas del terrorismo de ETA ha permitido "que los victimarios" tuvieran mayor apoyo social que las primeras y ha lamentado que todavía hoy los asesinos puedan hacer ostentación de su "mitología y simbología en rituales públicos".

"No deseamos venganza, no queremos vivir eternamente bajo la etiqueta de víctimas, pero la herida es imposible de cerrar observando el comportamiento falto de humanidad, chulesco y arrogante de numerosos asesinos en los tribunales de justicia", ha concluido.