Ripoll, el enemigo interno de Camps

Las responsabilidades sobre el caso Gürtel no acaban en Ricardo Costa". Así de contundente se mostraba el presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, tras la suspensión de militancia del ex secretario general del PP.

Las responsabilidades sobre el caso Gürtel no acaban en Ricardo Costa". Así de contundente se mostraba el presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, tras la suspensión de militancia del ex secretario general del PP valenciano el pasado 28 de octubre por sus implicaciones en el caso Gürtel. Desde ese momento, Ripoll había enarbolado la bandera de la transparencia política contra el líder popular en la autonomía y presidente valenciano, Francisco Camps, a quien ha exigido responsabilidades por sus imputaciones judiciales.

Públicamente había mostrado su desacuerdo con la gestión del caso, e incluso se había negado en ocasiones a acudir a las juntas del PPCV. Además, en los últimos meses plantó a Camps en varios actos de desagravio, sobre todo después de que el Supremo decidiera reabrir la causa de los trajes.

Ripoll es el último líder del 'zaplanismo' en el PP valenciano. La llegada de Camps al Palau de la Generalitat en 2003 tras la salida de Eduardo Zaplana hacia el Gobierno de Aznar abrió una lucha de poder en el seno del PPCV. En su primera legislatura, Camps consiguió 'limpiar' del partido en Valencia y Castellón a los partidarios del ex ministro de Trabajo. Solo en Alicante se mantuvieron fieles al actual dirigente de Telefónica.

En el congreso provincial de diciembre de 2008, el PP autonómico intentó desbancar a Ripoll de la presidencia del PP alicantino al presentarle una lista alternativa afín a Camps. Después de una apretadísima votación, Ripoll ganó a su contrincante, el ex alcalde de Benidorm Manuel Pérez Fenoll, por tan solo cinco votos. Desde ese momento, la provincia quedó dividida en dos. Los enfrentamientos se trasladaron a decenas de ayuntamientos y direcciones locales del PP, lo que ha fracturado al partido en la provincia.

Ripoll, de 53 años, es arquitecto de profesión e inició su andadura en la política en 1979 en las juventudes de UCD. Su máximo esplendor vino en la legislatura 1999-2003, cuando ocupó una vicepresidencia de la Generalitat con el propio Zaplana.

Tras la marcha del entonces nuevo ministro, pasó a ocupar la presidencia de la Diputación de Alicante hasta la actualidad, desde donde se ha convertido en el azote de Camps y en referente de sus críticos, "exterminados" de las Cortes y el Gobierno autonómico.