La cripta de la Sagrada Familia, cerrada desde que el pasado 19 de abril sufrió el incendio intencionado de un perturbado, ha reabierto sus puertas con una misa a primera hora de la mañana de este sábado.

El arquitecto Jordi Faulí, director adjunto del equipo constructor de la basílica de Antoni Gaudí, ha explicado a EFE-TV que los trabajos para reconstruir este espacio y dejarlo como estaba, o incluso mejorarlo, han consistido en limpiar la suciedad del humo de las bóvedas y rehacer la estación eléctrica, que estaba muy dañada.

En el portal de la sacristía ha sido necesario rehacer parte del marco de la puerta, con piedras procedentes de la cantera de Montjuïc, y también se ha renovado la madera de la puerta, mientras que han podido recuperar elementos metálicos de la misma que se han dorado.

Para recuperar los daños provocados por el incendio todavía faltan algunos trabajos en la sacristía. En concreto, hay que rehacer un altillo de madera que quedó completamente calcinado y limpiar las partes dañadas del pavimento.

Numerosas personas han acudido hoy a la misa con la que se ha reabierto la cripta donde, según ha recordado Jordi Faulí, la primera celebración eucarística tuvo lugar a finales del siglo XIX.

Las obras de reparación han durado unos tres meses, han contado con un presupuesto de unos 200.000 euros y han supuesto la incorporación de nuevos sistemas de seguridad, como cámaras de vídeo y detectores de humo.

El incendio provocado el pasado 19 de abril obligó a desalojar preventivamente a unos 1.500 turistas que visitaban la joya arquitectónica del Antoni Gaudí más religioso.