POLÍTICA

Rajoy supedita el diálogo con Zapatero a una rectificación en política económica

Niega que Camps vaya a adelantar los comicios e insiste en denunciar los juicios paralelos a los del PP.

Mariano Rajoy acudirá a la Moncloa si le cita el presidente pero condicionará su diálogo con José Luis Rodríguez Zapatero a un cambio radical de la política económica, "como en la lucha antiterrorista", según explicó ayer en una entrevista en la Cope. El líder del PP exigió una "rectificación" total para que sea posible un pacto entre el Gobierno y la oposición ante la crisis económica, similar al que comparten frente al terrorismo de ETA.


El mandatario opositor cree que la mejor política económica es hacer "lo contrario" de lo que hace ahora el Ejecutivo socialista y propone acometer un plan de "ideas claras y criterios" para huir de improvisaciones e incertidumbres. Su propuesta contempla una drástica reducción del gasto público y dejar en cero el techo previsto para los Presupuestos de 2010; la rebaja de impuestos a las pymes y a los autónomos; acometer reformas estructurales en educación, justicia, unidad de mercado y energía, y "decir la verdad a los españoles". "Es difícil confiar en alguien que ha modificado la decisión de los 420 euros a los parados tras un sinfín de dimes y diretes, con marcha atrás y adelante y continuos cambios de criterios", criticó, y calificó de "medida paliativa" la solución adoptada por el Gobierno para la ampliación de la ayuda al 1 de enero.


Negó el posible adelanto electoral en la Comunidad Valenciana y dijo que Francisco Camps "no tiene la más mínima intención de disolver las Cortes", al tiempo que anunció que en el mitin que celebrarán hoy en la ciudad del Turia solo hablarán "del futuro". Confesó que le "reconfortó mucho" el archivo de la causa del caso Gürtel contra Camps y otros dirigentes valencianos e insistió en denunciar el trato discriminatorio de la Fiscalía a los militantes de su partido, las detenciones mediáticas y los "juicios paralelos".


Expresó su sorpresa ante las declaraciones del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, sobre la sentencia del Tribunal Constitucional ante el recurso del PP contra el Estatuto de Cataluña cuando defendió su constitucionalidad y dijo que no se puede "negar la decisión tomada por el Parlamento catalán". Rajoy comentó que estas palabras reflejan el "curioso concepto de la democracia que tienen algunos" porque, de acuerdo con el razonamiento del ministro, "quitaríamos el poder judicial y quedarían solo los parlamentos".


Por último, se mostró optimista ante la trayectoria del PP y recordó que en este año ha "recuperado" buena parte del voto.