'Educación para la Ciudadanía' (EpC) quedará fuera de las aulas si el PP gana las elecciones. Así lo aseguró el presidente de esta formación, Mariano Rajoy, quien optará porque la formación cívica se distribuya en otras asignaturas. "No quiero adoctrinar a nadie, quiero libertad", aseguró Rajoy, quien defendió también garantizar por ley la enseñanza en lengua castellana "en toda España y en todas las etapas educativas".

Durante la clausura de la Conferencia de Educación del PP, el presidente de la formación anunció que, en caso de ganar los comicios generales del 9 de marzo, suprimirá como "asignatura específica" EpC, para constituir una "alternativa" basada en integrar la formación cívica en las materias propias de conocimientos sociales, para reforzar el estudio del ordenamiento constitucional, las instituciones de la UE y los Derechos Humanos. "No quiero adoctrinar a nadie, quiero libertad", expresó Rajoy durante su ponencia, ya que, a su juicio, es fundamental que las materias "respeten el ámbito de formación que corresponde a las familias". "Hasta ahí podíamos llegar", agregó.

Rajoy confía en convertir la próxima legislatura en "la de la mejora educativa", por lo que se comprometió a consensuar con partidos, poderes públicos y agentes económicos y sociales un consenso a diez años vista. Con este plan, el PP aspira a lograr una tasa de graduación en educación secundaria del 90%, reducir hasta el 10% el abandono temprano de la escuela, mejorar los resultados en ciencias y matemáticas, incorporar las nuevas tecnologías o impulsar la escuela pública, entre otras medidas.

Por la enseñanza del español

El PP propone que en las autonomías con lenguas cooficiales se "garanticen los derechos preferentes de padres y alumnos para que en todos los cursos y en todas las etapas educativas la lengua castellana se ofrezca como lengua vehicular junto con la cooficial". Así, los populares aspiran a generar un "bilingüismo integrador que tenga en cuenta y atienda a los derechos de padres y alumnos".

Para Rajoy, es importante "vertebrar el sistema educativo para que todos estos objetivos se logren en todas las partes del sistema nacional evitando una España con desigualdades educativas". "No podemos aceptar que haya una España a distintas velocidades en materia educativa", subrayó el líder del PP.

Rajoy anticipó también un hipotético acuerdo para fomentar la formación profesional, así como una revisión del sistema de elección de profesorado en la Universidad y la exención de tasas y precios públicos para los hijos de familias numerosas. "Lo que quiero es que los hijos de las familias más modestas puedan tener las mismas oportunidades que cualquiera", como clave de una España de ciudadanos "libres" e iguales", prometió Rajoy.

Respecto al inglés, el presidente popular anunció la puesta en marcha de un programa nacional de enseñanza de este idioma presupuestado en 800 millones de euros para lograr alumnos bilingües en ocho años. Entre las medidas de este plan, destacan la articulación de becas y cursos en el extranjero, tanto para alumnos como para profesores, y la creaciones de colegios bilingües e incluso trilingües en las regiones con lenguas cooficiales.

El colectivismo socialista

Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, criticó durante su turno el colectivismo del PSOE en materia educativa. "El PSOE no cree en las personas como seres únicos e individuales, son colectivistas y les gusta unificar, igualar por abajo porque no les importa la calidad de la enseñanza", apuntó. A su juicio, el Gobierno "sólo quiere que los niños reciban la misma educación durante el máximo tiempo posible, sin tener en cuenta sus deseos o sus aptitudes".

Frente a este sistema, Aguirre antepuso el modelo popular, "basado en el desarrollo integral de las personas en libertad", con un sistema educativo "que ofrezca libertad de elección y que tenga propuestas educativa que se adapten a las necesidades, aptitudes y preferencias de cada niño". Además, en caso de ganar las elecciones, el PP defenderá mediante sus propuestas "revalorizar el esfuerzo y el trabajo", porque, según Aguirre, "el aprobado general es una estafa".

El PP no es "creible"

Para el PSOE, la propuesta de Rajoy de consensuar la educación "no es creíble", tal y como afirmó en un comunicado la secretaria socialista de Educación y Ciencia, Eva Almunia, ya que "durante sus ocho años de Gobierno, el PP lo único que generó fue crispación y desmotivación en el sector de la educación". Según Almunia, el PP no hizo "nada en materia de Educación a excepción de la LOCE y la LOU, leyes que pusieron a la comunidad educativa totalmente en contra porque se hicieron sin buscar el consenso del que ahora hablan".

Respecto a la supresión de EpC, la dirigente del PSOE señaló que "a estas alturas seguimos sin saber cuáles son realmente los contenidos con los que no está de acuerdo el PP". En este sentido, recordó que la citada asignatura "contó con el respaldo de la mayoría parlamentaria y se imparte en alrededor de una veintena de países en la Unión Europea", algo que demuestra una vez más que "mientras el PSOE se inspira en modelos educativos avanzados europeos, el PP insiste en aislar a España del resto".

"En cuestión de becas, también son evidentes las diferencias entre las propuestas del PP y la política educativa del PSOE", enfatizó Almunia, que detalló que "el presupuesto destinado para becas y ayudas al estudio desde 2004 hasta ahora ha supuesto un incremento de cerca del 50%". Además, la LOE "es la primera ley educativa que va acompañada de una importante memoria económica, que asciende a más de 7.000 millones de euros, lo que permitirá entre otras cosas que todas las Comunidades Autónomas reciban del Estado una importante cantidad de dinero para poder establecer la gratuidad del segundo ciclo de infantil".