LÍDER DEL PP

Rajoy desprecia el cambio del Gobierno porque es una "venta de humo"

El líder popular afirma ante los suyos que el "viejo nuevo" Ejecutivo ha comenzado su andadura "como los malos defensas, dando patadas y arremetiendo" contra el PP.

Mariano Rajoy, junto a Esperanza Aguirre, Alberto Ruiz-Gallardón y Ana Mato, ayer en Madrid.
Rajoy desprecia el cambio del Gobierno porque es una "venta de humo"
E. NARANJO/EFE

Para Mariano Rajoy la reciente remodelación del Gobierno de Zapatero no es más que una "maniobra de distracción", "una operación de imagen", "una venta de humo", "una polémica artificial", una disputa "entre fulanismos", "un ajuste de cuentas". En definitiva, nada que merezca la pena ni perder un minuto en analizarlo. Lo que hay que hacer, dijo ayer, es seguir "nuestro camino sin distraernos" y sin hacer caso "al ruido". El líder de la oposición aseguró que los cambios en el Ejecutivo no van a modificar su estrategia porque con ella "vamos muy bien" y la Moncloa está a la vuelta de la esquina.

El presidente del PP clausuró la convención de su partido en la Comunidad de Madrid, un acto multitudinario en el que fue vitoreado al grito de 'presidente, presidente', si bien los asistentes corearon con más entusiasmo el de 'presidenta, presidenta' para Esperanza Aguirre.

Rajoy quiso transmitir a los suyos el mensaje de que no tenían que ponerse nerviosos con los relevos en el Gobierno porque no van a surtir el efecto revulsivo que busca Zapatero. El PP, vino a decir, tiene que seguir como hasta ahora, con una estrategia centrada en la política económica de los socialistas y sus efectos para los ciudadanos.

"El viejo nuevo Gobierno -lamentó- ha iniciado su andadura como los malos defensas, dando patadas y arremetiendo contra el PP". Pero "nosotros no estamos en eso, estamos en las pensiones, en crear empleo y en el bienestar de los españoles", avisó para que ningún dirigente de su partido entre en el juego de los socialistas.

Una advertencia que llegó tarde en el caso de la secretaria general de los populares, María Dolores de Cospedal, quien la víspera se apresuró a responder a las acusaciones de Rubalcaba sobre el machismo genético del PP.

Rajoy también quiso desmontar las acusaciones de que su única estrategia es no hacer nada, ponerse de perfil y esperar que la crisis haga el resto y dé la puntilla a Zapatero. Un reproche que ha calado en algunos dirigentes del PP que reclaman un mayor dinamismo de su líder y no limitarse a las críticas por la situación económica. "No hagáis caso -reclamó- de esos que intentan esconder su incompetencia con soflamas sobre la inexistencia de una alternativa a su inanidad e ineficacia".

Los chismes

El líder opositor justificó así su negativa dar su opinión y a bajar a la arena en asuntos vidriosos, como las polémicas por asuntos de corrupción o las recientes declaraciones del alcalde de Valladolid sobre la nueva ministra de Sanidad, Leire Pajín, a las que Rajoy tampoco se refirió ayer.

La política, apuntó, no es entrar "en lo accesorio o en el chisme" es algo más "noble", es atender las necesidades de los ciudadanos, y la mejor forma de hacerlo es distinguir "las voces de los ecos".

El PP, reclamó, tiene que atender las voces de los parados, de los pensionistas, de los jóvenes desempleados, de los emprendedores maltratados por el Gobierno, y no los ecos socialistas porque "la triste realidad" se encarga de "triturar" sus palabras.

En este sentido, recordó que el nivel de riqueza en España en 2011 será inferior al de 2007, la renta per cápita será menor que la de 2007, y, en cambio, el paro se habrá doblado respecto a 2007.

También rememoró que cuando Zapatero presentó su Gobierno en abril de 2008 dijo que era un equipo con notable capacidad de gestión; en la remodelación que hizo un año después señaló que suponía un impulso; y en la que ha hecho ahora la enmarcó en la recuperación económica. "Ese -concluyó- es el valor de la palabra dada" de Zapatero.

Hecho este balance, Rajoy indicó que lo único que se puede esperar del Ejecutivo es que "no haga más daño a los españoles" y que "se vaya pronto". Dejó además un recado para el jefe del Ejecutivo, el segundo en tres días sobre el mismo tema: "Que no vuelva a las andadas en la lucha contra el terrorismo".