'TENGO UNA PREGUNTA PARA USTED'

¿Qué hay de lo mío, señor presidente?

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró anoche que él no engañó a los ciudadanos sobre la situación económica antes de las elecciones de marzo de 2008.


La crisis económica abrió la ronda de preguntas de los ciudadanos al presidente en el programa de TVE "Tengo una pregunta para usted", y, en su primera respuesta, Zapatero reconoció los "problemas muy serios" de la economía española, además de mostrar su preocupación por cómo afecta a una parte "muy importante" de la ciudadanía.


"Pude equivocarme pero no engañé", señaló Zapatero al aludir a las previsiones económicas que daba el Gobierno antes de las elecciones, además de recordar que la mayoría de los organismos internacionales las han tenido que revisar a la baja en al menos ocho ocasiones desde entonces.


Zapatero reconoció que esta es una crisis "brutal" e insistió en que es internacional y ha estado provocada por el descalabro financiero que comenzó en Estados Unidos. El jefe de Gobierno animó asimismo a Javier, un electricista navarro que montó una empresa antes de las elecciones a la vista de las buenas previsiones y que le reprochó el haber fallado en ellas, a que continúe con su iniciativa "encomiable" de abrir un nuevo negocio.


En respuesta a una ciudadana en la segunda parte del programa, Zapatero reconoció que se le critica por ser optimista, pero defendió esta actitud ante la situación económica, además de su confianza en la capacidad de recuperación del país: "Vamos a superar esta crisis y vamos a salir más fortalecidos".


Cuestionado por otra ciudadana sobre si se había planteado dimitir "como hacen los entrenadores" de fútbol, ante la mala situación económica, Zapatero insistió en que su deber es estar al frente de la situación, "dar la cara" y "trasmitir confianza con la convicción de que vamos a superar la crisis". Además puntualizó que, a diferencia de un entrenador de fútbol, al presidente del Gobierno lo eligen los ciudadanos, y por tanto tiene un mandato y una responsabilidad con la sociedad.

Los parados le quitan el sueño

Además, el jefe del Gobierno sostuvo que, "sin duda", si algo le quita el sueño "son las personas que pierden su empleo".


El jefe del Ejecutivo fue interrogado en varias ocasiones sobre el destino del dinero público inyectado a los bancos, y subrayó que el Gobierno "no ha regalado un euro a la banca" sino que se les ha respaldado comprándoles unos activos, que "el Estado recuperará incluso cobrando un interés" y avalando sus emisiones de deuda, "como han hecho todos los gobiernos". Zapatero destacó que así se evitó el colapso, y que evitar un quiebra fue el primer paso para que los bancos recuperen liquidez y presten a familiar y empresas.


Por otro lado, Zapatero reconoció que la Administración de Justicia en España "no funciona bien". Además, aseguró que no le duelen prendas en hacer esta afirmación y anunció que se hará una mayor esfuerzo del que ya se ha hecho para mejorar este servicio.


De este modo, el jefe del Ejecutivo respondió a María Alba Cerezo, una de las personas le pudo interrogar y que le aconsejó que los parados ayuden en los juzgados para mejorar su funcionamiento.


Zapatero dijo que otras muchas administraciones se han modernizado, pero en la Justicia todavía no se ha conseguido a pesar de que se han incrementado los medios, pero aún no está lo suficientemente informatizada.


Interpelado acerca de que las muertes de violencia de género no bajan pese a los esfuerzos adoptados, señaló que se trata del mayor problema de convivencia tras el terrorismo. Reconoció que la ley "no ha reducido el número de víctimas, pero sí ha protegido a más mujeres", porque ha estimulado la denuncia y es donde hay que insistir, porque el Estado ha dispuesto muchos medios para esta tarea.


Además, el presidente del Gobierno anunció que aumentará el número de becas en estudios de grado y de máster dentro del proceso de adaptación al espacio de enseñanza universitaria europea, el llamado Proceso de Bolonia.


Llamó la atención también que cuatro de los cinco ciudadanos en representación del País Vasco pudieron hacerle una pregunta al presidente. Algo que no ocurrió con personas de otras comunidades. Un dato con posible lectura política en las elecciones vascas.

Aprobado

 

La entrevista "fue seguida por 6.432.000 telespectadores y alcanzó una cuota de pantalla del 30,4 por ciento. Una amplia mayoría de los espectadores se sitió representada "totalmente" o "en gran parte" por las preguntas,  según los resultados de una encuesta de Metroscopia para Efe, con 383 entrevistas telefónicas efectuadas entre las 23:45 y las 00:20 horas a ciudadanos que habían sido previamente contactados.

Según los datos de la encuesta, que tiene un margen de error del 5,1 por ciento, los ciudadanos valoran la intervención de Zapatero con un 6 sobre 10, una nota que en el caso de los votantes socialistas se eleva hasta el 7,2 y en el de los populares baja hasta el 4.


En general, 74 de cada cien encuestados da a la intervención de Zapatero una nota por encima del 5 y un 26 por ciento le suspende.

Las cifras varían mucho en este caso entre los encuestados en función del partido al que votaron en las últimas elecciones generales.


Entre quienes se decantaron por el PSOE aprueba para un 93 por ciento, mientras que entre los que votaron al PP un 40 por ciento le da una nota superior al 5 y el 60 por ciento restante le suspende.


La percepción de los espectadores en torno a la situación económica, que centró buena parte de la entrevista, se ha mantenido en general estable tras el programa: el 68 por ciento señala que no ha cambiado su impresión sobre este asunto.


Un 18 por ciento asegura sentirse "más preocupado" por la crisis tras escuchar al presidente, mientras que un 14 por ciento se ha quedado "más tranquilo". La encuesta de Metroscopia ha consultado a los espectadores, tanto antes como después del programa, sobre en qué medida el presidente tiene o no una serie de cualidades,

Así, antes del programa los encuestados le puntuaban con un 5,3 en sinceridad, un 5,4 en capacidad de transmitir confianza, un 5,6 en "sabe lo que hace", la misma nota en "es convincente", un 6,3 en "es conciliador", un 5,9 en claridad y un 5,2 en capacidad para sacar a España de la crisis.


Todas esas notas mejoran ligeramente tras el programa, en especial la valoración sobre la sinceridad y sobre que sabe lo que hace. Ambas se elevan 0,4 puntos. La pregunta que concita una mayor unanimidad es la que se refiere al mérito de enfrentarse a un formato televisivo como el de "Tengo una pregunta para usted" en un momento de crisis como el actual, que es valorada con más de cinco puntos sobre 10 por el 86 por ciento de los encuestados.


La nota media que le dan los ciudadanos a ese aspecto es de un 7,3 por ciento, que se eleva hasta un 8,5 en el caso de los encuestados que votan al PSOE y baja hasta el 4,8 en el de los del PP.