"Lo que está pasando en Grecia no lo quiero para mi país, aunque eso me cueste votos"

El candidato socialista a las elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha defendido este miércoles nuevamente la reforma de la Constitución para establecer un techo de déficit y deuda en todas las administraciones públicas, ya que ha asegurado que a España le sirve para generar confianza y protegerse de cara a un otoño que se prevé complicado para las finanzas mundiales. "Lo que ha pasado en Grecia no lo quiero para mi país, aunque eso me cueste votos", ha añadido.

Así lo ha explicado a 53 universitarios y titulados que han participado en los segundos 'Diálogos con Rubalcaba', unos encuentros en los que ciudadanos de distintos sectores expresan al candidato sus precupaciones y propuestas. En esta ocasión, los jóvenes se han preocupado por si la reforma implicará recortes en servicios sociales y por el hecho de que PP y PSOE rechacen la convocatoria de referéndum.

Según han informado fuentes socialistas, Rubalcaba les ha respondido que la mayor amenaza para el Estado del Bienestar es no poder pagar la deuda de un país, una situación que ha calificado de "traumática" si llegara a producirse. "La deuda es como el colesterol del malo. A los recortes te puede llevar la deuda, no la reforma constitucional", ha indicado.

A la pregunta de por qué se ha tomado esta decisión ahora y por qué se ha hecho tan deprisa, el candidato ha señalado que tanto el Gobierno como el PP han considerado que tras la situación de inestabilidad financiera vivida en agosto, introducir los cambios en la Carta Magna en tan sólo dos semanas tiene el objetivo de que la reforma "sirva" para generar confianza en los próximos meses. "Lo que está pasando en Grecia no lo quiero para mi país, aunque eso me cueste votos. La alternativa era un riesgo. España ha dado ahora más garantías que otros países", ha destacado.

Ahorrar no es de derechas ni de izquierdas

Como ya hizo el pasado fin de semana, Rubalcaba ha hecho hincapié en que "ahorrar no es de derechas o de izquierdas", sino que la diferencia entre una y otra ideología es cómo se gasta el dinero, cómo es la política fiscal y a quién le suben los impuestos, en referencia a su propuesta de incrementar los impuestos a las rentas más altas, a diferencia del PP, que esta semana descartó cualquier medida al respecto.

Además, ha respaldado la postura que está manteniendo el PSOE a lo largo de toda la negociación, ensalzando el acuerdo final en el que él mismo participó porque "entre los manirrotos que defienden una deuda excesiva y los fanáticos del déficit cero, están los socialdemócratas". A su juicio, la estabilidad presupuestaria es un "dogma progresista", al contrario que el neoliberal, que, en su opinión, es "cargarse" al Estado y apostar por el déficit cero.Llevar la estabilidad a la constitución

Por otro lado, ha lanzado un mensaje tanto a IU como a ERC, que ayer votaron en contra de la tramitación de la reforma en el Congreso, al recordarles que sí votaron la Ley de Estabilidad Presupuestaria de 2006, por lo que ha defendido que de lo que ahora se trata es de llevar este principio a la Constitución.

En cuanto al rechazo a convocar un referéndum para ratificar la reforma, Rubalcaba ha vuelto a explicar que la propia Carta Magna contempla el procedimiento que se está utilizando para modificarla, que en este caso no incluye una consulta popular, por lo que los socialistas no están renunciando "a ningún principio".

Pero además, ha insistido en que la inestabilidad financiera propicia que la reforma se lleve a cabo con tal rapidez, por lo que ha dicho que si la situación fuese distinta, las cosas podrían hacerse de otra manera.