Alicia, Elena y Susana son tres mujeres que después de sufrir durante años malos tratos de sus parejas han conseguido huir de ese horror. Ahora son personas nuevas, dicen con alegría, y piden a las víctimas que todavía soportan los golpes, "que no aguanten ni uno más".

Las tres están en un centro de mujeres y tratan de dejar atrás los malos recuerdos. Aunque las heridas tardan en curar, poco a poco van quedando solo las cicatrices.

Alicia tiene 39 años y tres hijos. Aguantó durante un año y medio las palizas del que fue su pareja. No puede explicar lo que sintió cuando recibió el primer puñetazo, pero sí recuerda que desde entonces no hubo un solo día en el que él no la moliera a golpes.

Elena, de 39 años, aguantó nueve años. "Él llegaba a casa bien, pero a los cinco minutos empezaba a chillar y pasaba a los golpes. Sabía dónde dármelos: en la cabeza, donde no se notaban los moratones", dice, y lamenta que no se atreviera a contárselo a la familia.

Susana tiene 35 años y es uruguaya. Tiene tres hijos y su pareja le hizo la vida imposible durante cinco años. Soportó palizas incluso estando embarazada.

Las tres están marcadas de por vida pero tienen ganas de empezar de nuevo. Alicia dice que ahora se siente con fuerzas para decir a las maltratadas que busquen ayuda, que les denuncien. "Son muy valientes. Les pido que no aguanten ni un golpe más, ni un insulto, ni una amenaza, porque son grandes luchadoras. Si aguantan el maltrato, ¿cómo no van a aguantar una nueva vida?", subraya.