EXTERIORES

Moratinos se quejó al ex secretario de Estado de EE. UU. por la falta de información sobre el caso Couso

Justicia solicitó el interrogatorio de los militares que dispararon contra el periodista en la comisión rogatoria tramitada hace 16 días.

El ex ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, remitió a los pocos meses de su toma de posesión una carta al ex secretario de Estado estadounidense, Colin Powell, en la que destacaba que los servicios estadounidenses son los "únicos" que pueden esclarecer "completamente" el caso Couso y se quejaba de que no hubieran respondido positivamente a las "sucesivas" peticiones emitidas por España para ampliar información sobre la muerte del cámara español.


Con el objeto de exponer la "permanente colaboración" del Gobierno con la Administración de Justicia en aras del esclarecimiento de la muerte del cámara español, el ministro del ramo, Francisco Caamaño, mostró ayer en el Congreso la carta remitida por Moratinos. La misiva aparece fechada el 4 de junio de 2004, apenas tres meses después de que Moratinos se pusiera al frente de Exteriores. En la carta, el ministro informaba de que se había reunido con la familia de Couso y pedía la colaboración y "ayuda" de los servicios estadounidenses. También recogía el agradecimiento del Gobierno por el primer informe del Mando Central de EE. UU. sobre las circunstancias que rodearon "esta tragedia", pero se quejaba de que las "sucesivas peticiones para ampliar esta información" no tenían "respuesta positiva".


El Ministerio de Justicia tramitó el pasado 29 de noviembre una comisión rogatoria a Estados Unidos, cursada por el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, con la intención de interrogar a los tres militares presuntamente responsables de la muerte de José Couso en el hotel Palestina de Bagdad, el 8 de abril de 2003. En ella, solicita además que se recabe "testimonio íntegro de la documentación obrante en los Departamento de Estado, Defensa y Justicia" de EE. UU.


La comisión rogatoria reclama a Washington que autorice el desplazamiento de una comisión judicial española para tomar declaración a los acusados, o bien que estos se trasladen a España.


La familia de Couso plantó ayer al Caamaño en la reunión prevista para explicar la actuación del Ejecutivo tras las revelaciones de los cables de Wikileaks. La familia alegó "desconfianza".