Política de marcha atrás. El PSC rectificó ayer a su director de campaña, Jaume Collboni, que el día anterior había dicho que en la situación actual (en referencia al Tribunal Constitucional y la sentencia del 'Estatut') no es "lo más prudente" contar con la presencia del presidente del Gobierno en los mítines del partido en Cataluña.

A través de un comunicado, el primer secretario de los socialistas catalanes y 'president' de la Generalitat, José Montilla, señaló que Zapatero "será invitado, como siempre, a participar en la campaña electoral del PSC para las elecciones catalanas".

La nota del PSC añadió además que el 'president' recibió las excusas del jefe de campaña por realizar unas declaraciones que "fueron interpretadas como un rechazo del PSC a contar con la presencia de José Luis Rodríguez Zapatero en la carrera electoral".

"El secretario general del PSOE siempre ha sido invitado a participar en campaña y en esta ocasión también lo será", aseguró José Montilla, que recordó que el objetivo del PSC es buscar acuerdos con el PSOE para hacer avanzar el autogobierno de Cataluña y las políticas sociales en toda España".

El portavoz del PSC, Miquel Iceta, también insistió en esta idea. "El objetivo de los socialistas catalanes es convencer a los socialistas españoles para que nos apoyen en la reforma de la ley del Tribunal Constitucional y la renovación de los magistrados", dijo. Iceta recordó además la defensa de la "plena constitucionalidad" del 'Estatut' que hizo en el Senado José Luis Rodríguez Zapatero

Mas pone el dedo en la llaga

El presidente de CiU, Artur Mas, también se refirió a las diferencias que mantienen en público los socialistas, aunque señaló que "la sangre no llegará al río, porque el PSOE y el PSC son hermanos de sangre y se necesitan mutuamente como el pan". "Zapatero acabará viniendo, porque los votos del PSC dependen mucho del PSOE", aseguró.

En cualquier caso, Mas trasladó un aviso para navegantes y advirtió a los socialistas de que llevará al Congreso y al Senado la resolución del 'Parlament' instando a la renovación del Tribunal Constitucional y a que este se declare incompetente para sentenciar el Estatut. "María Teresa Fernández de la Vega, los socialistas y el PP tendrán la oportunidad de votar la iniciativa", afirmó. Mas negó que se trate de una amenaza, aunque sí un "aviso". "Cataluña debe pasar a la ofensiva para intentar que este tribunal tan desprestigiado y roto internamente llegue a sentenciar sobre la voluntad entera de un pueblo", remató. Según el líder nacionalista, la resolución que permitió escenificar el frente común catalán en el Parlament se tomó desde un punto de vista "absolutamente democrático y muy necesario" para no permitir más una situación que calificó de "kafkiana y absolutamente incomprensible".

Por su parte, el secretario general de ERC, Joan Ridao, aseguró que "no es la primera vez que el PSC fanfarronea delante del PSOE", pero, en su opinión "el PSC intenta llevarnos a un falso debate" cuando "el debate es que el 'Estatut' ya está sentenciado y la sentencia será catastrófica".

Ridao hizo estas declaraciones tras el mitin que ERC, el único miembro del tripartito que apoyó pero no firmó la resolución del 'Parlament', celebró ayer en la plaza de Goya de Barcelona con motivo del 1 de mayo.

El líder de Esquerra Republicana de Catalunya insistió en que "el debate" sobre el futuro del 'Estatut' "no consiste en enfadarse con el PSOE porque no quiere renovar el Tribunal Constitucional", sino que "el debate es que el 'Estatut' ya está sentenciado".

En este sentido, Joan Ridao aseguró que CiU y el PSC "quieren alejar el problema planteando una renovación que es imposible" porque "no quieren que las próximas elecciones sean un referéndum sobre la viabilidad del Estado de las autonomías".