BUSCANDO UNA SALIDA A LA CRISIS

Los sindicatos se muestran abiertos a impulsar el dialogo social y un nuevo modelo económico

Zapatero prevé firmar un "gran acuerdo" económico con empresarios y sindicatos en las próximas semanas

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció este fin de semana que en los próximos días podría firmarse un "gran acuerdo" con sindicatos y patronal sobre el nuevo modelo de crecimiento económico. En un acto de la precampaña electoral para los comicios europeos del 7 de junio, en Albacete, el presidente destacó la necesidad de sumar a "todos" para un nuevo modelo en el que primen la formación, la educación y la protección social. El anuncio ha sido recibido con satisfacción por parte de los sindicatos mayoritarios españoles UGT y CC.OO. quienes se muestran abiertos a impulsar el dialogo social en busca de un nuevo modelo económico.


El secretario general de UGT, Cándido Méndez, valoró positivamente la propuesta del jefe del ejecutivo español asegurando que esto supone responder a las exigencias de las organizaciones sindicales. Según Méndez, el debate que mantienen Gobierno y agentes sociales en el seno del diálogo social debe servir para buscar un acuerdo en el que también participen las comunidades autónomas y que se centre, sobre todo, en reformar la educación y la innovación en España, poniendo encima de la mesa "más" recursos económicos.


Para el líder de UGT, el planteamiento que hizo Zapatero es "muy importante" y está en línea con una de las principales exigencias de los sindicatos: la convocatoria de una conferencia en la que participe el Gobierno central y los gobiernos autonómicos sobre el empleo y la industria. "Se necesitan mecanismos de coordinación", señaló Méndez, quien consideró que ésta es una manera de evitar "sorpresas insatisfactorias" en la lucha contra la crisis y que "cada uno reme por su cuenta" en la búsqueda de soluciones. "Tenemos que hacerlo todos en la misma dirección", indicó.


Méndez destacó la necesidad de que este gran acuerdo vaya acompañado por otro que se tiene que desarrollar con carácter de urgencia, pero de forma "paralela y simultánea" para resolver la ampliación de las medidas contra el desempleo. Precisamente el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, aseguraba en una entrevista al diario 'El Mundo' que la ayuda a los parados con cargo a las comunidades autónomas podría rondar los 500 ó 600 euros, durar unos seis meses y estar vinculada a la formación y el retorno al empleo.


Un nuevo modelo económico

Para UGT la actual situación económica y de "fuerte" destrucción de empleo obliga a todos los interlocutores implicados en el diálogo social, Gobierno, patronal y sindicatos, a buscar alternativas que mejoren el sistema productivo. El secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, recordaba en declaraciones a RNE que en el dialogo social firmado hace un año ya establecía la necesidad de llegar a acuerdos económicos y sociales y se hablaba de la importancia de transitar hacia otro modelo económico, no basado en la construcción y el consumo, sino en pilares como la tecnología, la industria, la formación y la educación.


"El Gobierno se ha comprometido a impulsar el diálogo social y es de esperar que esta iniciativa la concrete en los próximos días. Estamos a cerca de un año de cumplir la apertura del diálogo social y todos estamos obligados a aportar alternativas y propuestas para los intereses generales del país", dijo.


En su opinión, el trabajo del diálogo social y de los partidos políticos no tienen por qué estar supeditados, pues la función de los agentes sociales es hacer propuestas en el marco del diálogo social y en la negociación colectiva, mientras que la de las formaciones políticas se centra en la actividad parlamentaria. "Un acuerdo de carácter social puede ser útil y, evidentemente, el Parlamento jugará su papel para trasladar aquellas cuestiones que se entienda que necesiten desarrollo legislativo", precisó.


Respecto a la petición de algunos sectores, entre ellos el PP, de acometer una reforma laboral, Ferrer consideró que estas demandas son "preocupantes y recurrentes", además de "inútiles", pues la crisis tiene un origen financiero y no laboral. "Siempre que hay crisis y destrucción de empleo se pretende actuar recortando los derechos de los trabajadores y reduciendo la protección social. Son posiciones claramente interesadas, que sólo pretenden mantener el margen de beneficio empresarial (...) Insistir en la vía de reformas laborales es preocupante y lo rechazamos", explicó.


Respecto la posibilidad de que el PSOE y otros grupos políticos de izquierda lleguen a acuerdos en el Parlamento para ampliar la protección por desempleo, Ferrer recordó que los sindicatos vienen reclamando desde el pasado otoño la necesidad de mejorar protección del sistema de desempleo porque dicha protección es "claramente insuficiente".